Juliette.
Nos acercamos al organizador de las peleas, Zack habla de su turno y le digo que daré una vuelta, no le gusta que me vaya mucho sola por aquí aunque todos me conocen, es solo que hay muchas personas que no son buenas, carecen del sentido de conciencia.
Le sonrío para tranquilizarlo mientras me escabulló hacia la zona de prostíbulo, es la única con un bar, porque a pesar de todas las cosas ilícitas que se hacen aquí tienen la conciencia de decir que no pueden pelear o correr si estuvieron bebiendo.
Me pido una cerveza luego de que escanearan el código QR de la aplicación del club en mi teléfono dónde están los cronogramas y las personas que correrán, pelearán, etc, claramente no sale nada en mi cronograma hoy y tampoco les diré que es posible que si peleé, no tienen por qué saberlo.
Miro la nueva notificación en mi teléfono y sonrió mientras respondo.
💬 Cariño: ¿Qué estás haciendo angelito?
Mi cariño es un amigo en línea, hablo con él desde hace más de un año cuando la psicóloga de mi anterior instituto me recomendó un grupo para personas depresivas.
Sí, entendí lo que quiso decirme, pero no, no soy depresiva, tienden a pensar eso de mí por no hablar.
Entre solo por curiosidad, el grupo consistía en encontrarte un compañero y con él transitarias todos los episodios depresivos, es decir que en el momento en que sientas que todo está mal, que la depresión está llegando al límite en el que podrías atentar contra tu propia vida o la de otros tengas alguien que pueda sacarte del pozo hablando contigo.
¿Quién piensa en un desconocido en ese momento? No se, mi cariño al parecer sí, porque una noche me mandó que necesitaba hablar conmigo porque en realidad quería suicidarse, había tenido una discusión con su madre que lo había dejado abatido, empezamos a hablar luego de esa noche y más nunca paramos, como una de las reglas del grupo era que no dijéramos nuestros nombres nunca lo hicimos, aunque ya no estábamos en el grupo y teníamos nuestros números.
Nunca quisimos pasar esa línea de mostrarnos tal cual somos con nuestros nombres y todo porque sentíamos que perderíamos la conexión, así que lo único que conocemos del otro son las historias diarias, el pasado o al menos lo que nos permitimos contar y nuestros cuerpos, no sé cómo terminamos él con una foto de mi cuerpo y yo con una suya solo se que una cosa llevó a la otra y nos mandabamos fotos, casuales de outfit y sensuales de poca ropa.
💬Yo: Cariño, estoy con mi amigo, veremos un show ¿y tú?
Claro que le he contado sobre Zack y probablemente sobre un poco más de personas sin dar nombre, mi cariño es como Zack, pero en línea.
💬 Cariño: Igual, con mi amigo también veremos un show ¿Que coincidencia verdad? Tal parece que estamos conectados, ¿Como fue tu día? No me mandaste más luego de decirme que me contarías más tarde.
💬Yo: Mi día fue como siempre, llenó de comentarios de mierda y miradas de superioridad, nada nuevo.
💬Cariño: Todos los que te rodean son unos imbéciles, ¿Como van a molestar a la chica más buena de este mundo? Mi angelito no debería ser molestada.
💬Yo: Si bueno, yo los entiendo a algunos de ellos porque son como tú, están enojados por cosas que pasan fuera de la universidad y como tú al principio se la agarran con el más fácil.
💬Cariño: Perdón.
💬Yo: Está bien, tengo que irme cariño pero hablamos después ¿Te parece?
💬Cariño: Claro angelito cuídate por favor, beso.
Beso.
Hace poco adquirió eso, nunca antes había dicho beso, siempre me decía chau y mandaba un emoji de una mano saludando, su beso me hace sentir un cosquilleo en el vientre que me agrada y nunca se que contestarle.
Guardo el teléfono frustrada por no saber qué contestar y me sobresalto cuando noto que hay un hombre a mi lado, está tan cerca de mi que se me hace raro no haberlo notado, sus ojos verdes me miran con cierta molestia y calor, aún con la escasa luz puedo distinguir al hombre, su cabello castaño está recortado perfectamente al igual que su escasa barba de unos días, sus músculos firmes se marcan a través de las telas de su camisa y pantalón, sus manos grandes adornadas con tatuajes y sus dedos, joder tiene dedos grandes, lo único que no puedo precisar bien es su edad aunque creo que es mayor que yo, mayor que todos los alumnos de la universidad tal vez.
Tomo mi vaso con un poco más de fuerza y lo miro con molestía.
Juliette: ¿Qué mierda quieres? Vete.
Hombre: ¿Quién es cariño? ¿Es tu novio?
Frunzo el ceño sin entender por qué se mete en mis asuntos.
Juliette: ¿Qué te importa?
Lo empujó y comienzo a alejarme, pero me sostiene del brazo con firmeza, su cabeza se mete en el hueco entre mi hombro y mi cuello y planta su boca en mi oreja, puedo sentir su respiración erizando la piel de allí y mi corazón latir fuerte en mis oídos porque aunque estoy nerviosa, el hombre no me causa miedo, no me causa rechazo.
Ya estoy loca eso es seguro.
Hombre: Todo lo que tenga que ver contigo me interesa mi reina, será mejor que empieces a decirles a todos los hombres que te rodean tu verdadera fantasía porque cuando me presente frente a ti otra vez para reclamarte estarán en la misma habitación por las buenas o por las malas.
El shock no me deja hacer nada cuando el hombre misterioso deja un beso en mi cuello y se va haciéndome perder la vista de él.
No le voy a decir mis fantasías a nadie.
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Oscuras Fantasías. [PRÓXIMAMENTE DISPONIBLE EN FÍSICO POR AMAZON]
Roman d'amour(Independiente) Todo puede ser posible cuando la ficción llega a la realidad y tus oscuras fantasías salen a luz. Inicio: 03/05/2024 Fin: 24/06/2024