Hasta las estrellas- juantin

Capítulo 14

MARTIN:

La semana fue larga, estaba repleto de exámenes y tareas, por lo que no pude salir siquiera de la habitación. Después de las tardes intensas empollando ansiaba que llegasen las últimas horas del día, aquellas en las que podía escaparme unos minutos para charlar con mis amigos,sobre todo con Juanjo.

Pasábamos casi todas las noches en vela, hablando de todo y de nada, pero siempre con alguna excusa para volver a dormir juntos. "Es que hace frío", "Ya es muy tarde para salir al pasillo" o "No puedo dormir" eran las justificaciones del mayor para poder posarse en mi pecho y dormirse apaciblemente.

He recibido toques de atención por los profesores, me refugio en mis pensamientos y estoy distraído en clase, hasta mi profesora predilecta, Abril Zamora, notó este cambio en mi. Al terminar su clase, se acercó a mí.

-Martin, cariño, podemos hablar un segundo? Me agarró de la mano con la misma delicadeza que transmitía su voz. -Está todo bien? Te noto muy abstraído en mis clases, y las adorabas, ya no veo esa pasión que ponías en interpretación.

-Perdón, Abril. Está siendo una semana muy rara, una persona se está apoderando de mi mente y parece que no quiere salir en mucho tiempo. No sé si sabes a lo que me refiero.

-Lo comprendo, el amor es...- Dijo antes de que la interrumpiera.

-Amor? De verdad piensas que es amor? -Musité con los ojos abiertos como platos.

-Es alguien que te gusta, cierto? Perdón por precipitarme, supuse que te referías a eso. -Se disculpó la mujer.

-No, es que es complicado. Me gusta, y mucho, pero es distinto, nunca antes había sentido esto.

-Pero eso es precioso Martin, qué es lo que te ciega?

-Es que no somos nada, pero pasamos el día juntos, incluso dormimos juntos, pero ya me ha dejado claro que solo somos "amigos" -Dijo yo, haciendo énfasis en la última palabra.

-Yo creo que deberías hablarlo, cariño. Estás seguro que los sentimientos de esa persona no son correspondidos? -Preguntó ella.

-No lo tengo para nada claro, se supone que no, pero me demuestra lo contrario.

-Si confías plenamente en él, creo que seria buena idea que le comentases como te hace sentir a ti sus actitudes, tal vez no se da cuenta. Cada persona es un mundo.

-Muchas gracias, Abril. Eres la mejor. -Declaré yo antes de lanzarme a sus brazos y abrazarla fuertemente.

-No hay de que, amor. A ver si te ayuda a estar mas atento en clase, recuerda que tu actuación es este sábado, ponte las pilas. -Me aconsejó.

-Lo haré. Me muero de ganas de cumplir mi sueño.

Y era así, tantos años estudiando para llegar a actuar y cantar en un escenario daba por fin su recompensa. Mi objetivo principal no giraba en torno a la popularidad que podría llegar a conseguir, sino el dejarme el alma y expresarme con canciones. Pienso todos los días en mi familia, los cuales me han apoyado siempre en todo lo que he hecho y lo que he podido llegar a conseguir, nada de esto hubiese sido capaz sin ellos.

Pese al malestar en todas las clases de la mañana, salí dando brincos de alegría por la universidad recordando que en unos días volvería a cantar. Esto me hizo acordarme de Juanjo, le pedí que viniese, sería buena idea que esté presente? me pondría muy nervioso, con tal de no mirarle fijamente mis nervios no saltarán. No estaba allí, donde siempre, esperándome con el coche para dar una vuelta, su ausencia hacía la calle vacía, sin sentimiento, mas triste que nunca. Pero esta vez no me inmuté y mucho menos lloré, sentí que era lo mejor. Dejar que mis sentimientos por Juanjo se reduzcan el mínimo, así tal vez no dolía tanto verle. Me duele tanto actuar de esta forma.