El templo de Fatum

Capitulo 6

   Movió sus manos de manera nerviosa. No estaba seguro de hacer esto. Aunque solo seria por unos días, a el nunca le había gustado, o siquiera pasado por la cabeza, la simple idea de escaparse; pero para encontrar a su hermana, estaba dispuesto a hacer cualquier cosa. Abrió el cierre de su mochila, y si el imbécil de Timee tenia razón, no tardarían mas de un mes, por lo tanto unas pocas cosas alcanzarían. 

   Era una locura. Después de todo, el cantante podría estar loco debido a la perdida de su hermana; quizás el estaba aun mas loco por acompañarlo. Pero luego de esa "presentación" de quince minutos hecha por este, la cual tenia como objetivo converserlo, era complicado no creerle. De igual manera... Dentro de todo había un pequeño impulso, un impulso que le pedía seguir al rubio...

-Estas enloqueciendo Vend- se dijo a si mismo. Solo iba por su hermana y porque, sin el, Timee moriría en su segundo día- ¿Siquiera me importa si muere? Seria mas paga para mi de cualquier manera.

-Hijo...¿Estas bien?- pregunto su madre preocupada desde afuera del cuarto.

-Si mamá, tan solo... Estoy en llamada- respondió nervioso.

-Bueno, no grites tanto- pidió en un tono pasivo-agresivo su madre.

   Sacudió su cabeza en un intento de aclarar sus pensamientos. Soltó un pequeño suspiro antes de mirar impaciente la ventana; la casa tenia dos pisos, y su habitación (Anterior mente compartida con su hermana) se encontraba en el segundo. Con una cuerda lograría bajar sin lastimarse.

-Amenay- exclamo mirando hacia el techo- por favor no me juzgues por esto.

...

-¿Alguna idea de donde están?

-No te desesperes, Laser, estamos mas cerca que nunca.

-¡Esto no funcionara, Stop Sign! ¡Ya le preguntamos a absolutamente toda la ciudad y tan solo cincuenta personas dicen haberlos reconocido!- grito la fémina, golpeando, repentina mente, la pared.

-Ouch.

-¡No grites!- reprocho el grisáceo- Ya estamos cerca. Se que quieres encontrarlos, pero quejándote lo haces mas difícil.

-Si "papá"- burlo la castaña.

-Tu, pedazo de-

-No se peleen, por favor, estamos los tres en el mismo equipo.- pidió el de pelaje blanco.

-No defiendas a tu-

-Bueno, cállate ahora, ¿Tu tuviste algún avance, acaso? Sin contar el de tu colección de golpes en la pared

-Les tendría si no me dejaran cuidando a su hi-

-Es la hija de doce años del jefe de policía, no la podemos dejar sola.

-¿Pero ella lo ve a el como su padre? Ustedes la cuidan mas que el- comento, mientras sus blancos y brillantes ojos, siendo lo único visible en su rostro, mostraban una expresión juzgadora.

-Ya basta con ese tema. Si, los entrevistamos a todos ¿Que haremos ahora?

-No lo se, ¿No eras tu el delegado de la unidad, Hunter?

-Si, lo soy, pero si dejaras de molestar, seria mas fácil idear cosas- declaro, esperando el contraataque de la chica.

    Se quedaron discutiendo durante un rato. El de suéter rojo miro sus mangas un poco, intentando distraerse para no ser metido en el "intercambio de ideas". Eso pasaba todas las reuniones, de cualquier manera, con su intensidad dependiendo de el humor de los otros dos. Suspiro un poco y abandono la habitación. Laser también lo hizo, dando fuertes pisotones en el suelo para demostrar su enojo. The Hunter azoto la puerta.

    La fémina camino, intentando no cruzarse con Stop Sign, porque, en ese momento, no necesitaba un sermón en tono pasivo. Abrió la puerta de la pequeña "habitación" destinada a ser su dormitorio, pero en realidad solo entraba su cama y un escritorio. Abrió cuidadosamente el cajón de este, sacando un pedazo de papel de su interior.

-Te vengare, Winnie, es una promesa- declaro esta de nuevo- pero si tan solo te recordara bien seria mas fácil.