Capítulo 18 (Final)

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DAN

Empecé a temblar conforme nos íbamos acercando a mi casa.

Jaekyung me miraba cada tanto y me tomaba con más fuerza.

—¿Estás bien?

—Ya no estoy seguro de hacerlo— admití con voz entrecortada y unas risas desde dentro acrecentaron mi miedo. Reconocí la voz de Heesung, él estaba ahí dentro con la abuela y con mi hermana. Retrocedí un poco, solté la mano de Jaekyung y necesité apoyarme en el tronco de un árbol para tomar aire. Se me formaba un nudo sobre el nudo de la garganta y mis pensamientos eran erráticos.

—Dan...— Jaekyung me tomó las manos.

—Sé que para ti no es importante, pero ellas son mi familia— de pronto me entró el pánico y a pesar de haberle dicho que también quería decirles, me acobardé en el último minuto.

Quería echarme a correr sin rumbo y desvanecerme para reaparecer sólo cuando estuviera listo y tuviera completa seguridad de que no haría sentir mal a nadie.

—Está bien si no quieres hacerlo.

—Te prometo que lo haré. Voy a decirles... voy a...— Jaekyung me hizo callar con un beso. Cuando su boca se alejó de la mía se sintió como si mi realidad pasara en cámara lenta. Las certezas se habían transformado en dudas y yo no estaba seguro de nada.

Sabía que Jaekyung era mi extraño y que esos recuerdos que me planteaba como fantasías estaban construidos sobre recuerdos, recuerdos reales, quizá un poco distorsionados, pero reales, al fin y al cabo.

Lo abracé. Sentí que me rodeaba por la cintura y descansaba el mentón sobre mi hombro. Respiré, me llené de su olor y me fue muy difícil volver a mirarlo sin tener que tocarlo.

—No puedo hacerlo.

—Iré a casa. Entra ya, hace demasiado frío.

—Si— caminé hasta la puerta, oí la voz de la abuela y la de Heesung. Jaekyung agitó la mano y desapareció en la oscuridad.

Sentí un hueco en el pecho, sentí que todas mis ilusiones eran arrebatadas momentáneamente.

—Dan. Por fin llegas, Heesung estaba a punto de decirnos cómo llegar a la clínica— dijo mi abuela.

—Un señor se puso mal. Tuvimos que esperar hasta que estuviera mejor y comprobáramos de que no necesitaba ser transportado a la ciudad— miré a Heesung—. ¿Y tú qué haces aquí?

—También estoy feliz de verte Dan.

—No seas así. El pobre tuvo rodaje y aun así hizo un espacio para venir a verte— si realmente las miradas pudieran fulminar a las personas, en ese momento Seorim habría sido desintegrada porque no soportaba que precisamente ella estuviera tratando de hacer que algo fluyera entre mi ex y yo.

—Sólo para que les quede claro— comencé. Obtuve el valor de alguna parte de mi inconsciente, quizá mis sentimientos por Jaekyung me impulsaron a hacerlo—. Heesung me hirió mientras estuvimos juntos ¿Saben lo mal que se siente tener que amar a alguien desde las sombras? Es horrible, no se lo deseo a nadie. No podíamos vernos ni salir a menos que fuera dónde y cuándo él quisiera ¿Por qué nuestras citas eran todas en la casa de la abuela? Sé que les parece un buen chico, también creo que lo es, pero no es un buen novio, al menos no para mí. Así que dejen de hacerse ideas.

La expresión de los tres cambió al instante. Terminé de hablar y noté que me faltaba el aire. El corazón me latía tan rápido que lo imaginé ansioso por escapar de mi pecho.

Mi abuela tragó saliva.

Seorim se quedó de piedra.

Y Heesung carraspeó inquieto y después me miró a los ojos.

Un par de extraños (Jinx)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora