•4•

999 62 4
                                    

𝗔𝗴𝗮𝘁𝗵𝗮 𝗦𝗶𝗹𝘃𝗲𝗿

Mi abuelo y yo comíamos en la gran sala de la casa. Cheyenne ya hacía unos días que no estaba en casa por lo que sospechaba que habían cortado, pero mi abuelo no me decía nada.

—Voy a comprar una casa más cerca del dojo—mencionó—. También hay un instituto cerca, el West Valley. Puedes ir ahí, también van chicos del dojo.

—Am... claro—respondí—. Y, ¿qué hay de esta casa?

—Podemos usarla para verano o venderla, ya veré—contestó—. Voy a ir con el sensei Kreese al Miyagi-Do, coge un coche para ir al dojo.

Asentí.

[...]

En el dojo, la mayoría entrenaba o calentaba por su cuenta.

—Levanta un poco más los brazos para que te sea más fácil protegerte en caso de que te ataquen—le indiqué a Kenny quien golpeaba un muñeco.

—¿Así?—cuestionó.

Asentí.

—Vanga, sigue—dije.

—Saben que tú y yo somos la mayor amenaza y que la condicional nos limita mucho—le dijo Robby a Tory.

—Tenemos que pillarlos donde no haya nadie—respondió la rubia.

—¡Atención!—habló mi abuelo—. Venid aquí.

Todos nos pusimos en formación.

》Acabamos de reunirnos con los senseis de Miyagi-Do. A partir de ahora, ni una pelea hasta el campeonato.

Fruncí el ceño.

¿El lema del dojo no era "sin piedad"?

—¿Nuestros enemigos nos humillan, y debemos dejarlo correr?—cuestionó Tory, molesta.

—Claro que no—respondió el sensei Kreese—. El enemigo nunca merece piedad.

—Pero lucharemos en su momento—continuó mi abuelo—. No malgastemos un puñetazo si no ganamos un punto.

》Escuchad, si vuestros enemigos os provocan de alguna manera o se ríen en vuestra cara, ¡perfecto! Id guardándoos toda esa rabia porque la necesitaréis en su momento.

》¿Ha quedado claro?

—¡Sí, sensei!

[...]

-Hay tres cosas necesarias para ser un campeón-decía mi abuelo mientras se paseaba entre nosotros-: las tres "D".

Dimos una patada.

》Deseo, dedicación y disciplina. Las dos primeras os las puedo dar yo, la última también, pero solo si queréis recibirla, ¿queréis?

-¡Sí, sensei!-dijimos todos.

-Perfecto, posición Junbi-todos hicimos lo que dijo-. Haber, queréis derrotar a vuestros enemigos, y lo haréis cuando sea el momento. Hasta entonces centraos en el entrenamiento. ¿Entendido?

-Sí, sensei-respondimos.

-¡Con convicción!

-¡Sí, sensei!-repetimos todos.

𝗦𝗶𝗹𝘃𝗲𝗿'𝘀 𝗽𝗮𝘄𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora