Capítulo 37

49 3 0
                                    


Un mes después ...

Melany Russo


Mentiría si dijera que estoy lista para despedir a Cecilio, mi cerebro aún no asimila su partida.

Las palabras se quedan cortas, al dolor interno que me provoca su perdida, describir el sentimiento se me es imposible, es aquel vacío inexplicable que sientes en el pecho.

Saber que cuando vaya a su antigua propiedad, él no me abrirá la puerta con un abrazo confortador y con una sonrisa que a pesar de estar en la peor situación te trasmite paz.

Me acerco a su ataúd bajo la mirada de las mafias aliadas a los imperios.

— Perdón, debí hacer algo para evitarlo, espero y me perdones.— Me disculpo a pesar de que no me puede oír.— No alcanzaran las palabras para describir lo que fuiste para mí, perdón por darte tan poco cuando me lo diste todo, abuelo.— dejo caer varias lágrimas.

—Bichito, comenzará la ceremonia.— Jackson se me acerca y me abrasa por detrás.

Me limpio las lágrimas y voy con Jackson tomado de la mano, nos sentamos con Nick y Sam.

 No es un enigma el hecho de que sin él a mi lado no tendría las fuerzas suficientes para poder estar aquí, tampoco puedo negar que el apoyo que me ha dado Nick y Sam también ha sido parte crucial para que no vuelva a caer en la RRF.

No demuestres tus debilidades.

Aquella frase que tanto me decía, suena en mi cabeza.

La ceremonia comienza, el encargado, inicia a describir un poco de la vida de mi abuelo.

Se siente algo extraño estar aquí, cuando estuve en su primer funeral, tenía la certeza de que él estaba a salvo en una locación que solo yo conocía, cuanto desearía que este fuera el mismo caso.

Lo único que tengo por seguro, es que cuando todo esto termine, haré pagar a Lizzy, se metió con lo más importante para mí, tocó a una persona intocable para mí, pagará por su traición y por lo de Cecilio.

Vuelvo de mis pensamientos, al Jackson apretar su agarre en mi mano.

El dirigente del acto, da por terminada la ceremonia, todos nos levantamos, Jackson me pasa una pistola, todos comenzamos a disparar al cielo, en conmemoración del mejor líder de imperio.

Todos se acercan al ataúd, a despedirse por última vez.

Jackson, Nick, Sam y los demás miembros de mi imperio, nos acercamos en donde será depositado el ataúd.

¿No resucitará?

¿En serio lo voy a perder de esta forma?

Bajan el ataúd por completo y siento que mis piernas pierden sus fuerzas, Jackson me sostiene.

—Todo estará bien, te lo prometo.— me abrasa fuerte, apegándome a él.

¿En serio estaré bien?

¿En algún momento me perdonaré por dejar que esto pasara?

La Mafia Roja #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora