𝕊𝕖𝕟𝕤𝕒𝕔𝕚ó𝕟

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-Lo siento, Rosie, no lo recordaba.

Una voz despertó a Ángel, abrió los ojos de a poco, parpadeando repetidas veces para que su vista se regularice a la luz de la habitación. Después de bostezar busco con la mirada al dueño de la voz. Levantó un poco su torso para así voltear su cabeza al lado contrario, ya que estaba boca abajo.

Cuando giró su cabeza lo pudo visualizar, un gatito sin camisa, algo despeinado, con una copa de vino en mano y hablando por teléfono. Escuchaba atentamente, ni siquiera se había percatado de que el demonio que se encontraba a su lado ya había despertado.

-Si, lo sé, pero lo olvidé por completo. No te quiero mentir- tomó un pequeño trago- dudo mucho que pueda ir, no quiero dejar solo a Ángel.

El chico agudizó su oído al escuchar ser mencionado en la conversación.

-No creo que quiera, pero cuando despierte le pregunto, chao, Rosie.

Dicho esto tomó un trago a su bebida y colgó la llamada sin siquiera ver el dispositivo.

-¿Quién era?

La voz del demonio tomó completamente desprevenido al pobre gato, que por el susto casi se atraganta con la bebida y comenzó a toser.

-Mierda, piernas, me asustas, creí que seguías dormido.

-¿Por qué tanto susto, bigotes? ¿Qué? ¿Estabas hablando con el otro?- preguntó en un tono burlesco.

-Primero, no me llames así?- Ángel rió ante el falso enojo- y segundo, si, estaba hablando con el otro, ¿Qué motel me recomiendas, dulzura?- habló sarcástico, y con toda la intención de seguirle el juego a la araña.

-Ja, ja, que gracioso eres ¿Por qué no te vas de comediante?- le echó una mala mirada a lo que el contrario solo rió- en serio ¿Quién era? Y ¿Por qué me mencionaste?

-Pues ¿Qué tanto escuchaste?- preguntó divertido.

-Lo suficiente. Responde, bigotes- husk lo miró mal.

-Hablé con Rosie, en un rato va a ver un evento. Van a ir figuras importantes en el anillo del orgullo, y yo estoy invitando. Pero lo olvidé, entonces le estaba diciendo que no iría, es todo.

-¿Por qué no vas a ir?- Ángel se impulso con sus brazos superiores y se sentó en la cama.

-Primero, porqué en esos eventos se maneja mucho dinero, armas, alcohol, contratos y en general lo organizan las personas que controlan toda esta parte del pentagrama. Segundo, y más importante, no te quiero dejar solo.

Ángel escuchaba atentamente, todo aquello que Husk mencionó le recordaba mucho a lo que fue en vida y a como creció, todo ese mundo le encantaba.

-No entiendo cómo no quieres ir, a mi me encanta todo eso- hablaba muy ilusionado.

-Yo lo sé, Ángel, me lo has contado muchas veces ¿Quieres ir?

-Claro que quisiera ir.

-Perfecto- el overlord se paró de la cama y caminó directo al baño de la habitación- preparate, nos vamos en una hora.

-¿Qué?

-Que te pongas algo bonito, dulzura- habló con un tono tierno desde la puerta del baño.

-Pero ¿No dijiste que era para las figuras más importantes del anillo? Además me mencionaste que no querías ir.

-Todos los invitados tienen un pase extra, además me es suficiente que tú quieras ir para que vayamos, así que anda, ve a cambiarte.

Ángel no podía con la ternura, ese gato lo volvería loco. En un movimiento rápido salió de la cama, corrió en dirección al gatito y saltó para abrazarlo. Esté inmediatamente se lo devolvió, sintiendo y apreciando el contacto que le ofrecía el peliblanco, ambos sentían que se podían quedar así por siempre.

𝚃𝚘 𝚝𝚑𝚎 𝚎𝚗𝚍//𝚑𝚞𝚜𝚔𝚎𝚛𝚍𝚞𝚜𝚝//𝚑𝚊𝚣𝚋𝚒𝚗 𝚑𝚘𝚝𝚎𝚕Donde viven las historias. Descúbrelo ahora