Capítulo 6

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Una búsqueda incansable ha empezado desde hace seis días, el caballo del hijo del duque Artur ha desaparecido, unos ladrones han burlado la seguridad y entrado a la caballeriza del palacio de la familia para robar a un caballo, al parecer deseaban venderlo, pero el tiro les ha salido por la culata, ya que todo el grupo ha sido atrapado esta mañana, pero sin el caballo, es por eso que el duque ha iniciado una búsqueda en todo el pueblo. Desde esta mañana la noticia ha recorrido todo rincón del pueblo, ya que se ofrece una enorme recompensa por encontrar al caballo robado, muchos aventureros e incluso la comisaría han iniciado esta búsqueda para encontrarlo, sin saber que su objetivo se encuentra en una pequeña granja.

Samuel y su caballo se encuentran listos para dar su último recorrido de la semana, Rayo ha estado practicando la confianza y la comunicación con Samuel, los primeros días fue muy difícil lograr una conexión, pero al cabo de unas cuantas caídas y tropiezos, ambos han perfeccionado su confianza.

—Todo está listo. — Samuel se acerca a Rayo para acariciarlo e intentar montarlo, Rayo se porta bien y esta vez no se altera. Entre la oscuridad y el silencio de la noche, ambos toman camino hacia el mercado, cuando de repente un sonido proveniente del bosque asusta mucho a Rayo quien se echa a correr. Samuel intenta hacerlo que se detenga, dándole pequeños golpes con su pie al cuerpo de Rayo, pero entre más golpea más rápido corre el caballo.

—¡Para! ¡Para, por favor! — Samuel mira hacia enfrente y observa que viene hacia ellos una carreta con un hombre ya mayor, Samuel suelta un grito y golpea el lado derecho de su caballo, Rayo logra esquivar a la carreta a pocos centímetros de chocar, pero se desvían del camino y entran al bosque.

Samuel esquiva y evita chocar con los árboles que están por su camino, intenta encontrar la forma de detener a Rayo, pero el caballo no parece entender, así que empieza a gritar palabras sin sentido para intentar detenerlo.

—¡Coieh! ¡Paré! ¡Dalida!... ¡Quieto! — Rayo se detiene al instante, haciendo que Samuel salga disparado al aire hasta caer al suelo. — Rayo se asusta mucho, así que corre para ver si se encuentra bien su amigo, afortunadamente no le ha pasado nada a Samuel, solo un pequeño golpe y un susto, por lo que se levanta del suelo y vuelve a montarse en Rayo para buscar la salida e intentar disimular que nada ha pasado.

Después de unos cuantos minutos logran salir del bosque y se incorporan en el camino, mientras caminan, Samuel nota que Rayo está muy asustado, quizás por lo que acaba de pasar en el bosque, así que acerca su mano a la cabeza de Rayo para acariciarlo y decirle.

—Tranquilo, solo fue un accidente, yo se que no fue tu intención hacerlo. — Samuel acerca su cabeza al cuerpo de Rayo, haciéndolo sentir un fuerte alivio.

El mismo camino los hace pasar algunas cuantas casas y el mercado, llevándolos hasta la parte que conecta hacia el otro pueblo, Rayo se detiene un momento, ya que desconoce el camino, Samuel lo acaricia y le pide que continue, el caballo hace caso a la orden de su jinete y continúa caminando.

El camino al que han entrado lo llaman el silencioso, ya que nunca se escucha quien viene y mucho menos quien va, la gente que ha pasado por este camino, recomiendan a las personas del pueblo y visitantes, a no entrar por la noche, el jamás acercarse al bosque y mucho menos detenerse en el camino, ya que es el lugar más inseguro y fácil para ser la próxima víctima de un robo, muchas personas que han entrado han salido sin sus pertenencias, otro consejo que les dan a los visitantes es que jamás, pero jamás atiendan a un pedido de ayuda de personas perdidas, puesto que lo más seguro es que sea un atraco.

Si el camino silencioso por el día es muy tenebroso, por la noche y entre la oscuridad es mucho peor y desafortunadamente Samuel lo está comprobando, el sonido de los búhos provenientes del bosque le están erizando la piel, como siempre, Samuel tiene la mala fortuna de estar en situaciones como éstas

Amor a la antigüitaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora