En el tercer día del Torneo Nacional, se jugaron los últimos partidos de cada grupo. El Furano impresionó a todos al obtener una victoria completa en sus 5 partidos, asegurando su lugar en la fase final. El Musashi también destacó al ganar fácilmente sus partidos, a pesar de que su capitán, Jun Misugi, pasó la mayor parte del tiempo en la banca. El Naniwa, de Osaka, siguió el mismo camino de éxito.
En cuanto al Meiwa, logramos 4 victorias y un empate, este último contra el Hanawa. Sin embargo, nuestro mayor desafío estaba por venir, ya que nuestros rivales eran los formidables jugadores del Nankatsu.
El último partido del primer grupo enfrentó al Nankatsu contra el Hanawa, y el resultado determinó qué equipo pasaría a la siguiente fase. Como era de esperarse, el Nankatsu emergió victorioso, dejando al Hanawa eliminado del torneo.
Con el día llegando a su fin, todos nos reunimos en el hotel, compartiendo historias y conversando sobre los emocionantes partidos que presenciamos.
Por otro lado, Hyuga no me ha dirigido la palabra o no hemos tenido una conversación que no sea fuera de órdenes en un partido desde entonces. Parecía que nos estábamos distanciando y Takeshi lo notó.
─ ¿Sabes que le pasa a Hyuga que anda pensativo?─ le pregunté a Takeshi, él lo conocía mucho mejor que yo.
─ No lo sé. Pero, entre nosotros, creo que es por el partido del Nankatsu─ Respondió entre susurros─ Fue la primera vez que se vió en aprietos por un jugador muy opuesto a sus ideales.
─ ¿Qué? Y después me dice a mi que me tome los partidos encerio.
─ No quiero ser entrometido, pero ¿ya arreglaron sus asuntos?
─ No, no estoy interesada en disculparme. Yo solo di mi punto de vista.
─ Bueno, él tampoco va a ceder. Ya sabes cómo es. Tienen que arreglar esto, puede que el equipo se separe más y más si dos de nosotros están peleados entre sí.
Lo que dijo Takeshi me hizo pensar si yo no era tan diferente a Hyuga. Es todo tan confuso.
─ Lo pensaré. Pero eso no va a...
De pronto, hubo bullicio del otro lado de la sala.
─ ¡Mira por dónde andas, idiota!─ grita enojado Hyuga antes de darle una bofetada a otro chico, al capitán del Furano, Hikaru Matsuyama.
─ Tú... ¡Maldito!─ Exclama Matsuyama, sujetando el cuello de la camisa de Hyuga.
Todos ahí intentamos detenerlos. Los del Nankatsu también estaban ahí.
─ ¡Matsuyama, basta!─ Grita Misaki
De nuevo esa mirada, pero esta vez a Misaki.
─ ¡Hey, Misaki! Lograron pasar a la última fase, pero no se emocionen tanto, ¡no duden que el Meiwa será quien gane!─ exaspera Hyuga.
Daba miedo acercarse, pero logramos separarlos haciendo que Hyuga retrocediera.
─ ¡Paren ya!¡Resuelvan esto en el campo!─ ordena Tsubasa que estaba junto a Misaki.
Se oye un aplauso, alguien se acercaba a nosotros. Era Jun Misugi, capitán del Musashi.
─ Tsubasa tiene razón, no sería prudente lesionarse antes de los partidos.
Hyuga gruñe y nos da la espalda, apunto de irse.
─ Takeshi, _______, tenemos que ir con los demás─ se fue sin más.
Le dije a Takeshi que después los alcanzaba. Rápidamente, asintió y siguió al capitán.
─ Sé que yo no debería meterme en esto. Pero quisiera disculparme por la actitud de Hyuga─ enuncié con una reverencia a los demás─ no sabemos que pasa con él últimamente, y no pensábamos que reaccionaría de esa manera.
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CAMPEONES | Kojiro Hyuga y Tú |
Hayran Kurgu¡CAMPEONES! Hay que buscar la victoria cueste lo que cueste, incluso si se necesita barrer el piso con el jugador del equipo contrario. Hyuga siempre tuvo eso claro. Ganar es ganar. Su orgullo hacia a sus ideales inquebrantables. Pero, ¿una compañer...