𝙼𝚎𝚝𝚊𝚗𝚘𝚒𝚊

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μετάνοια

Palabra proveniente del griego. Significa "más allá, de la mente" es el proceso de transformación Que cambia la forma de pensar, sentir, de ser o de vivir de alguien.

...

Cuando corrí solté las tijeras y fui hacia donde Sanzu, entonces me acerqué a él y sus manos estaban sangrando.

-¿SANZU, QUÉ DEMONIOS TE PASO?

Sanzu me miró extrañado y tomó un vidrio acercándolo a mi mejilla, haciéndome una pequeña cortada, solo solté un pequeño gemido de dolor, pero no era lo importante. Tomé su mano con fuerza y le quité el vidrio, pero me di cuenta que sus manos estaban llenas de cortadas, al igual que sus brazos, estaban sangrando...

-Espérame aquí, Sanzu

Corrí para ir por un trapo y alcohol, pero él me gritó. -No deberías de preocuparte por mí, eres una ingenua, déjame en paz.

Sentí escalofríos en mi vientre, pero evité escucharlo y tomé las cosas que ocupaba para curarlo, luego me dirigí corriendo hacia Sanzu, pero él me aventó, haciendo que mi blusa se manchara de su sangre y las cosas salieran volando. Aún así no deje que el miedo me invadiera, y me levanté.

-solo quiero ayudarte

-no necesito tu maldita ayuda, vete o te mataré-. [exclamó Sanzu, levantándose]

Al escucharlo decir eso me erizó la piel, no sabía si continuar acercándome a él, pero de algo estaba segura, él no decía mentiras y sin duda cumpliría su palabra. Decidí hacer lo mejor.

Me alejé.

Sanzu me sonrió sádicamente, luego tomó un cuchillo que se encontraba cerca de su alcance y comenzó a caminar hacía mi dirección, haciéndome retroceder algunos pasos. ¿Por qué demonios se estaba acercando? ¿Intentará hacerme daño?

Entonces el pelirosa se acercó más, hasta sentir su aliento en mi cara. Comencé a temblar, no pude evitarlo, pero otra parte de mí estaba ansiosa por que se acercara más, no sé qué demonios me ocurría. En ese instante mi cuerpo actuó repulsivame haciendo un movimiento involuntario, realizándole una caricia en su mejilla. Me miró confundido, pero luego volvió a darme una sonrisa.

Lo tomé con fuerza e intenté besarlo, pero el evitó que eso sucediera, moviéndose a otro lado. -¿acaso creíste que me dejaría besar así de fácil, mocosa?-[articulo, para luego comenzar a burlarse de mí]

Rodeé mis ojos, haciendo presente mi enojo, le metí una bofetada. En ese momento el dejo de reír y me metió un puñetazo, solté un pequeño grito de dolor, luego él me acorraló en la pared y comenzó a acercar el cuchillo a mi cara, haciéndome cortadas muy pequeñas.

-Maldita, ¿no entiendes que te odio? Te mataré.

Me quedé helada y no pude reaccionar, me había bloqueado por completo, de igual manera no tengo escapatoria, pues me tenía acorralada. Creo que moriré hoy...

Sanzu tomó mi mentón y acercó el cuchillo lentamente a mi vientre, pero en ese instante alguien lo pateo por detrás, haciendo que él cayera sobre mí. Me asusté aún más, pero me di cuenta que eran los Haitanis, ¡habían llegado! Me alivie por completo al ver sus rostros, creí que en verdad moriría.

-ve a la habitación, Hanemiya-[me decía Ran, mientras agarraban a Sanzu]

Asentí rápidamente y me fui, me encerré en la habitación y me escondí en el armario. No sé qué estaba por pasar, pero no sería nada bueno. Extraño mi vida normal, realmente no quiero esto.

Cristal RotoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora