Cristal Roto

𝚁𝚊𝚖ɘ̀

Χάος (caos, griego)

Ramé, proveniente del Balinés que significa "sensación de que algo es hermoso y caótico al mismo tiempo."

...

Cuando terminó la función y todos los combates finalizaron me quedé bocabierta, ¿Cómo pueden ser tan ágiles y tener ese tipo de habilidades? Son geniales, sin duda me encantaría ser como ellos en algún momento.

-¿y bien? ¿Analizaste sus técnicas y movimientos?

-Sí, me gustó más el de aquella chica-. [dije, señalándola]

Esa chica sin duda estaba preciosa y verla en acción la hacía verla aún más atractiva. Incluso la figura de su cuerpo era tan espectacular que me deslumbraba. La verdad, nunca había sentido algo parecido por alguien de mi género. Seguramente lo único que siento es admiración y respeto, sí, solo debe ser eso.

-tienes razón, sus técnicas son muy buenas, le diré a ella que te entrene, ya estoy decidido.

-¿Qué? Dudo que acepte.

-¿Eso crees? Con el dinero se soluciona todo, siempre.

Asentí, pero Ran estaba muy equivocado en lo que decía. El dinero no siempre soluciona las cosas, quizás solo las materiales, pero hay muchas otras que no se pueden cambiar o solucionar con dinero.

Luego nos acercamos donde aquella chica, estaba tomando agua, hablando con algunas otras personas más. Pero, por alguna razón me puse tensa y mis nervios comenzaron a notarse, ¿Qué demonios? ¿Por qué no puedo controlarme? Estoy empezando a sudar.

Entonces Ran se percató y me tomó de la mano, su toque era tan cálido que me hizo sonrojar, pero me contuve y me puse firme. No podía seguir siendo tan débil, a este paso me destrozarían por lo ingenua que soy. Necesito no mostrar tanto lo que realmente me sucede.

Vi la hora del reloj y solo quedaban 5 horas aproximadamente, para ir a la misión.

-Hola, tú debes ser Riko, ¿no? [preguntó Ran]

-Así es, ¿desean un autógrafo?

-No, no venimos por eso. Te seré franco, necesito que entrenes a mi chica

Entonces Riko me miró, y su mirada hacia mí, era tan fría que incluso podía sentir la misma oscuridad. Era tan fascinante.

-¿Por qué haría eso? Mírala bien, parece una simple oveja, una presa más.

Eso hizo que me enfadara y le contesté. -¿A quién le llamas presa? Soy más que eso. Ran, vámonos.- [exclame, volteando a ver a Ran]

-No.

Me enfadé mucho más y me di la vuelta, dejándolo con Riko, pero él me sujetó del hombro y me susurró: -déjame que yo me encargué de esto, no te vayas aún.

Asentí.

...

Unos minutos después, él regresó con una gran sonrisa en su cara y detrás de Ran venía Riko, su semblante había cambiado a una algo más cálida, pero aún así seguía teniendo esa oscuridad.

-Te entrenaré, solo por esta vez, sígueme. [me decía Riko]

-De acuerdo

Mire a Ran, pero él solo nos seguía, hasta que llegamos a una sala, tenía varias cosas de entrenamiento, seguramente era ahí donde ella iba para ejercitarse. Entonces nos detuvimos y Ran habló