Shirou Maestro y Espada del Infinito

Capitulo 13

La Espada de la Madre de las Llamas, comenzando el asalto contra el Pilar demoniaco parte 1.

Cierto, pero falta una arma. - dijo Muramasa mirando a Shirou en ese momento, su error por haberse centrado en la creación de la nueva Gae Bolg de Scathach olvido la arma más importante en ese momento y la que pertenecería a su descendiente.

Dame un pedazo de tu alma niño. - dijo Muramasa dejando todas las katanas de lado en ese momento sabiendo que estaba por hacer su mejor creación, después de todo desde que Jean le entrego el sello donde era contenida la Madre de las Llamas supo que su mejor creación daría lugar.

No una katana cualquiera o una espada con un efecto poco visto, no, estaba apuntó de crear algo que se compare al mismísimo Mjolnir de su mundo, una de las armas más poderes existentes y duraderas, así que necesitaba mucho Uru, Adamantine y Vibranium templado con Adamantium, y junto a la fusión de almas de Shirou con la Madre de las Llamas su mejor creación daría lugar.

Esta bien. - dijo Shirou antes de usar el hechizo de corte de alma sintiendo un pequeño picor de su alma que se fue rápidamente regenerada mientras una esfera de color dorado rodeado de otros 6 colores, estos sorprendió a Scathach al ver la alma de Shirou.

Muramasa sin embargo se dio cuenta de que eran esos seis colores, sabía que ahora estaba dando el último pulido de esta espada llamada Muramasa Shirou, así que decidió tomar un metodo de forja más complejo pero haría que la arma estaría más unida a Shirou y solo respondería a Shirou y a quien él confía.

Vamos chico. - dijo Muramasa haciendo que Shirou confundido comenzó a seguir a su ancestro con las demás siguiendo sus pasos, pronto Shirou vio con sorpresa como llegaban a una forja diferente en ese momento la puerta de la misma era enorme.

Que sepan, esta es una copia de la Forja divina de Asgard, la mejor y más poderosa, con el calor de una de las estrellas más grandes y calientes del universo... - dijo Muramasa haciendo que todos abrieran los ojos entendiendo de lo que habla, el viejo herrero miro a todos con una seriedad profunda a las persona.

Si, en mi universo nada de las mitologias, héroes del pasado y guerras se centraban solo en la tierra, escalaban al nivel de afectar al universo, por eso las armas divinas era más poderosos que solo poder conceptual, sino poder destructivo. - dijo Muramasa aunque también como demonio era consciente de las batallas que el Hombre Araña había librado a lo largo del multiverso, incluso la guerra eterna con los Herederos que puso en peligroso la red de la vida, aunque los héroes y guerreros aracnidos salieron victoriosos.

Interesante, confio que mi lanza fue reforja en esta forja. - dijo Scathach mirando a Muramasa que asintió en ese momento, después de todo ella era consciente del poder de las llamas y el hecho que esta forja era más poderosa que cualquiera en su universo, después de todo su mundo estaba concentrado en Gaia, las pocas interacciones de seres de otros planetas representaron una amenaza para Gaia o son una amenaza para el futuro.

Esta en lo correcto su majestad, su lanza ahora es una de mis mejores creaciones y más poderosa de lo que piensa, con el tiempo su nueva Gae Bolg hará más cosas que solo manipular la causalidad y dar siempre en el corazón, sino manipula el destino, la suerte, Karma y casualidad, en realidad aconsejo que solo se desate su poder total con preocupación porque podría partir el mundo en dos. - dijo Muramasa mirando con orgullo la lanza en manos de Scathach que miro su nueva Gae Bolg con una sonrisa, ahora entendía porque su poder aumento cuando tocó el arma, aunque fue reforjada aun recordaba a quien la blandió multiples en el campo de batalla y como un arma de inmenso de poder aumento el poder de su portadora una vez la volvió a someter a su voluntad.

Ahora voy a forjar tu arma Shirou, no se podrá salir de esto pero sin duda sería una de las armas más poderosas. - dijo Muramasa entrando en la forja divina en ese momento con Shirou a su lado, Jean, Tamamo y Aoko no pudieron seguirlos ya que el poderoso calor las obligaron a retroceder ya que encuanto la puerta se abrió sintiendo como su piel comenzaba a quemarse por el calor de la forja que sin chiste era tan caliente como la más vieja de las estrellas en ese momento.