Una meta cumplida

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Los pasos de una mujer eran relajados mientras cerraba los ojos

Siete: (visualiza el cielo junto al mar...y tiñelos de rojo...)

Repentinamente una mano la tomó de la pierna haciendo que saliera del trance y abra los ojos, ante ella la segunda zona del monte estaba en llamas mientras sus habitantes intentaban defenderse de los rebaños atacando, luego bajó la mirada topandose con un moribundo hombre al que le faltaba una pierna intentando detenerla, la mujer se sacudió la pierna para liberarse del agarre

Hombre: p-por que?

Siete: por qué? Hay mejores últimas palabras- la sombra tomó su arma y la clavó en el hombre del suelo acabando con su vida y luego de envainarla otra vez continúo subiendo el monte a paso lento

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Los maestros de la espada y los militantes bajaban por el monte a toda velocidad

Genbu: y por qué vienen estos extorsionadores?

Auron: podrían agradecer la ayuda

Stahl: digamos que- el hombre sostuvo lo que quedaba de su brazo faltante- algunos aquí tenemos una cuenta pendiente con esa sombra

El maestro vestido de rojo vió al militante sorprendido al imaginar lo que le pasó a su brazo y tomó una decisión

Suzaku: escuchen! Vamos a dividirnos para ayudar a toda la gente posible, ustedes quédense en el tercer nivel y nosotros bajaremos

Alan: que!? Pero maestro!

Suzaku: es una orden Alan!

El chico se quejó pero no tuvo más opcion que resignarse viendo como los maestros se alejaban y ellos se dividían para salvar a la mayor cantidad de gente posible, por su lado los cuatro maestros hablaban entre ellos

Genbu: está podría ser una buena oportunidad...si ellos se mueren

Seiryu: no

Genbu: p-pero

Seiryu: ya usaron sus palabras, ahora que muestren sus acciones

Byakko: si...además tenemos algo más importante de lo que encargarnos, dime Suzaku, sabes dónde encontrar a la traidora verdad? No puedo esperar a rebanarla

Suzaku: calma esa sed de sangre, pero si, siendo ella solo podría tomar un camino hasta la cima

Luego de un momento los cuatro maestros frenaron en seco al tener un reencuentro

Siete: oh, esto acelera las cosas

Suzaku: no quería pensar que era cierto...que te pasó Kirin!?

Siete: que me pasó? Esa es una pregunta extraña...por cierto, de verdad no tenían a alguien mejor para reemplazar al saco de huesos?

El tigre blanco no pudo evitar caer en la provocación y en menos de un segundo sus dos espadas estaban camino a decapitar a la sombra quien relajada y sin siquiera verlo desenvainó su arma bloqueando el ataque sin moverse ni un centímetro de su sitio lo que dejó sorprendido al maestro más joven

Genbu: veo que has practicado mi estilo!

El hombre de verde se lanzó pisando el suelo lo que hizo que varias rocas se levantaran, la mujer evitó el ataque y se acercó rápidamente al maestro quien respiró profundamente y tensó sus músculos a la vez que desenvainaba su gran arma preparándose para el impacto, la mujer se detuvo en seco pata luego agacharse un poco mientras volvía a envainar su arma, en menos de un segundo salió disparada rompiendo el suelo que estaba pisando y golpeó con su codo el abdomen del maestro y para la incredulidad de los presentes lo mandó a volar, la tortuga verde chochó con una casa rompiendo su muro mientras los demás maestros por instinto tomaron sus armas con firmeza

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