XX. Roto

267 31 7
                                    


Jihyo sonrió de lado, cerrando los ojos cuando Young besó su frente y se acurrucaron muy juntos, rozando sus piernas. Ella deslizó el pulgar por sus clavículas y lo besó lentamente.
Lo amaba igual que el primer día. Con él a su lado se sentía completa, acompañada y protegida.

– Te extrañé muchísimo amor.

– Yo también. Te extrañé demasiado, hermosa Hyo.

El hombre la miró con amor y besó su mejilla, rozando su nariz en el cuello de ella, haciéndola reír.

– Ya casi tengo todo listo para ustedes. – acarició la mejilla de su esposa, haciéndola mirarlo a los ojos. – Pronto podremos comprar una casa enorme en otro lugar más lindo. Jaehyun tendrá una habitación con baño y tú y yo ya no tendremos que separarnos.

– ¿Si?

– Si mi vida. Y estaba pensando que podemos darnos la oportunidad de tener otro bebé. Ahora sí tendríamos una mejor estabilidad, ya sea que compremos una casa aquí o en Chicago.

El señor Jung esperaba una reacción alegre, debido a que la mujer antes había deseado ser mamá de nuevo y se lo había comentado siempre, sin embargo esta vez sólo arqueó la ceja quedándose pensativa.

– Creo que Jae está bien siendo hijo único...

– ¿Tú crees? Él siempre dice que quiere un hermanito.

– Hace mucho que no lo dice.

– Está bien amor. Si ya no quieres tenerlo está bien, no hay ningún problema. Así es perfecta nuestra familia.

– Además ahora ya tiene a Taeyong...

– Taeyong no es su hermano de sangre, Hyo.

– No seas así. Es sólo un niño.

– Viene de esa familia, amor. Tarde o temprano te darás cuenta de que no es buena idea criarlo como tuyo cuando aún tiene relación con ellos. Desde que esa vecina llegó se nota lo problemática que es.

– Tae es un bebé, Young. – ella le frunció el ceño, alejándose un poco de él, sin embargo él la sostuvo suavemente para poder abrazarla otra vez. – No tiene la culpa de nada.

– De hecho por su edad es un niño ya. Y te exige mucho. No te respeta.

– Si yo me muriera... Me gustaría que alguien amara a Jaehyun y cuidara de él. Por algo llegó a nuestras vidas. No podemos ser así.

El hombre suspiró, intentando evadir la mirada con la que Hyo siempre lo convencía, sin embargo no pudo hacerlo por mucho tiempo.

– Está bien. Intentaré no ser tan rudo.

– Gracias. Te amo mucho.

El señor Jung la miró con complicidad y adoración y le besó la frente.

   ⭑

– ¿Es enserio, Jihyo?

El señor Jung la miró y negó con la cabeza.

– ¿Qué tiene de malo? – Jihyo envolvió a Nanamak en una pequeña toallita antes de acomodarlo sobre el brazo, cuidando no incomodar para nada al ave. Fernanda brincó sus pies y regresó a su corral de manera graciosa.

– No estás para desgastarte con otro niño. Por eso sólo tuvimos a Jae. Además ese pollo es el de Jaehyun.

– Amor ¿Cómo va a ser desgastante para mí esto? Además llevo a Nanamak porque a él le gustan más los abrazos de Tae que a Fernanda ¿Ves?

El pollo mencionado ladeó la cabeza de manera graciosa, dejándose manipular por la mujer con facilidad.

– ¿Vas por ese niño todos los días a la escuela y además le llevas al pollo para que los acompañe?

Angel Baby - Jaeyong Donde viven las historias. Descúbrelo ahora