—Parece que hoy no esta tu romeo.Celeste me habló sacándome completamente de mi disociación, una que tenía desde que salimos de ese lugar de mierda, hasta que llegamos al bar que frecuentábamos las ultimas semanas.
Hoy repentinamente, Patricio no estaba detrás de la barra, lo que nos dio curiosidad, pero yo eso no lo demostraba.
Ante las palabras de mi amiga, solamente la mire con una mueca de indiferencia, alzando mis hombros como si no me interesara la ausencia del morocho esta noche.—Bueno...
Suspiro algo cansada, mirando a su alrededor en busca de alguien a quien robarle. Yo solamente estaba callada, copiando su acción, pero sin emitir ni un solo ruido.
—Vamos a la barra.
Demande finalmente caminando hasta la barra de madera vieja y rústica, sentándome en el mismo lugar de siempre, pero Celeste solo me hizo una seña, caminando hasta un tipo no mas de treinta años, algo ido por seguro alguna sustancia que consumió.
Una ultima mirada le di, gesticulando con mis labios un "Cuidado", para después volver mi vista al interior de la barra donde solo había un viejo.—¿Queres algo nena?
Su voz gruesa y gastada llamo mi atención, mientras veía como dejaba el repasador blanco en su hombros, y apoyaba sus manos en la mesada interna de la barra, viéndome fijamente.
—Un Whisky...por favor.
Me miro una ultima vez, asintiendo con su cabeza y se dio media vuelta, agarrando la botella, y sirviendo en un vaso, que segundos después ya estaba en frente mío.
Le di una sonrisa que terminó siendo mas bien una mueca, y fije mis ojos en los hielos que flotaban, eso hasta que el señor me habló.—Pato esta en su descanso, si lo buscas...esta en el patio interno.
Mi cabeza sé alzó al instante oí el nombre del morocho, lo que fue raro hasta para mi esa reacción, pero solo pude ver como este señor estaba concentrado en limpiar y secar los vasos de vidrio.
—Por esa puerta.
Señalo con su cabeza una puerta que estaba a un costado de la barra, por la parte de adentro, y no me miro, siguió en lo suyo.
En cambio yo, estaba en plena duda de que hacer, si ir o no, con mi vista puesta en la puerta de madera.Dudosa mire a Celes, ella estaba riendo y hablando muy entretenida con ese pibe, y me quede tranquila al ver que no había segundas intenciones, entonces con cuidado me pare, agarrando el vaso y saliendo al patio con cuidado.
Mire a mi alrededor buscando a Pato, hasta que lo vi sentado en un banco, fumando y tomando whisky; verlo así me dejo media boba; su perfil perfecto, con su nariz fina, su barba imperfecta, le daba un aire interesante.En silencio, camine hasta el que le daba una calada a su pucho, con sus ojos cerrados y su cabeza hacia atrás.
Me senté a su lado captando su atención al toque, pero yo, por la vergüenza y ansiedad que manejaba, no lo mire, solamente empecé a jugar con el borde del vaso.
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Cae el sol || Patricio Sardelli
FanfictionDos personas, dos almas, una historia. ¿Podrá Patricio salvar a Luz de toda la mierda en la que la rodea?