Capítulo 4

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Cuatro de la mañana y sigo sin poder dormir. De nuevo el insomnio volvía a atacarme y provocaba que no pudiera pegar ojo.

Miro a Noah y él ya estaba  en el quinto sueño. Tenía la boca medio abierta y unos pocos mechones rizados le caían por la cara, haciendo que estuviera muy mono. Le aparto delicadamente el pelo que tenía en la cara y le doy un beso en la frente, para luego levantarme.

Me meto al baño con mi móvil y le mando un mensaje a mi hermana, teniendo la esperanza de que ella también estuviera despierta. Lejos de lo que deseaba, después de esperar quince minutos por su contestación, pierdo todo tipo de esperanza al no recibir ningún mensaje de su parte.

Suspiro y recurro a mi segundo recurso: Joost. Voy a su chat y le mando un mensaje, recibiendo una respuesta de él a los dos minutos, siendo seguida de una llamada entrante de su parte.

—Hola— digo entre susurros, nada más descolgar la llamada.

—Hola— me contesta él en el mismo tono.— ¿Tampoco puedes dormir?

—No… tengo un insomnio terrible estos últimos días— contesto.— ¿Te apetece ir a dar un paseo? La noche está bonita.

—Me has quitado las palabras de la boca.

—Bien, en cinco minutos estoy ahí— le digo, para luego colgar la llamada y salir del baño.

Voy hasta los pies de la cama y ahí me pongo mis Convers negras, para luego ir hasta la maleta para coger una sudadera de Noah y ponérmela.

De despedida, le doy un beso en la cabeza a Noah y me voy de la habitación cerrando delicadamente la puerta.

Emprendo camino por los pasillos desiertos del hotel hasta llegar a la puerta de la habitación de Joost, donde llamo y al segundo me abre la puerta.

—Buenas noches— lo saludo.

—Buenas noches— me contesta él. Tenía el pelo revuelto y llevaba puestas sus gafas (unas que no solía llevar en los medios, sino que las tenía más para lo casual) y unos pantalones de pijama, dejando visible su torso tatuado al no tenerlo cubierto.—¿Quieres pasar?

—Vale— contesto, encogiéndome de hombros y entrando a la habitación, cerrando yo la puerta cuando pasé y siguiéndolo a él hasta la cama.— ¿Desde hace cuánto intentas dormir?

—Desde la una— dice recostándose en la cama, al igual que hice yo al lado de él.—¿Tú?

—Desde las once… Noah lleva fuera de combate desde las diez y no encuentro ninguna manera de entretenerme.

—Menudo blando— dice entre risas Joost, haciendo que yo esbozara una sonrisa.— Yo llevo desde que se fue Appie de la habitación escribiendo algo, pero no me convence…

—¿Lo puedo ver?

—Por supuesto— coge su móvil y entra en sus notas, para luego tendérmelo después de entrar a una de ellas.— No es una gran obra de arte, pero… ya me dirás si te gusta.

—Vale…— contesto, cogiendo el móvil y comenzando a leer el poema que tenía escrito. A medida que iba leyendo, me iba dando cuenta de que era una especie de declaración de amor y, a medida que iba bajando, me iba sintiendo cada vez peor.— Es bonito…

—¿En serio?— me pregunta cuando acabé de leerlo.

—Sí…. ¿Se lo dedicas a una chica?

Él asiente.— ¿Tú crees que le gustará? Porque a ella no le gusta mucho este tema de poemas y cartas de amor— cuando dice eso, ya supe que no iba a ser para mi (a pesar de que me moría por ello) porque a mí me gustaban ese tipo de ñoñerías.

—Seguro que le encantará… Es muy bonito, Joost— le digo, con una sonrisa forzada, disimulando lo que de verdad sentía.—Y… ¿Se puede saber quién es esa chica?

—Pronto la conocerás— contesta con una sonrisa.

—¿Es guapa?— le pregunto por curiosidad.

—Pienso que es la mujer más guapa que he visto en mi vida…— contesta, suspirando y mirando hacia el techo. Yo suspiré y, no tan contenta, miro hacia el techo.

—Pues ya me avisarás cuando sea la boda— digo, con una sonrisa.

—Te enterarás de primera, te lo prometo— contesta.— ¿Te apetece ir a dar ese paseo?

—Estoy muy agusto aquí, pero si quieres vamos a darlo.

—No, deja, yo también estoy muy agusto así— me contesta, para luego bostezar.—Incluso diría que me está entrando el sueño…

—Lo mismo digo…— contesto, bostezando también.

—Que tal… si dormimos— dice, comenzando a acomodarse en su sitio de la cama.

—Me parece bien…— contesto, poniéndome cómoda y cerrando los ojos. Ahora mismo tenía tanto sueño, que no era capaz de ir a mi habitación.—¿Te parece bien si me quedo?

—Me parece perfecto— contesta, él aproximándose un poco hacia mi.—Buenas noches.

—Buenas noches…
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Hello :)

Hoy os traigo un capítulo algo cortito (pido perdón por eso), pero, no os preocupéis, porque en los siguientes capítulos van a ser drama puro y duro 😏

A mí me ha gustado mucho escribir esta escena entre Anaís y Joost, porque  me parecieron muy tiernos 🥹 Espero que a vosotros también os gustara 🫶🏼🩷

¡Recordar que podéis ponerme ideas para la historia! Yo estaría encantada de saber vuestros intereses y así también me ayudais para saber por dónde queréis que siga la historia.

Por cierto, si os fijáis, en este capítulo he llamado a Appie al que llamaba antes Apson. Esto se debe a que, indagando en internet, descubrí que su nombre real era el primero, así que lo corregí. Perdonar por ello, fue un error mío.

Nos vemos la semana que viene con un capítulo más!!! Un abracito de mi parte 💗

Kisses <3

Vrienden || Joost Klein ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora