| 𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐓𝐖𝐄𝐍𝐓𝐘 - 𝐓𝐖𝐎: 𝐏𝐑𝐄𝐎𝐂𝐂𝐔𝐏𝐀𝐓𝐈𝐎𝐍 |

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|𝐂𝐀𝐏Í𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐕𝐄𝐈𝐍𝐓𝐈𝐃Ó𝐒|

𝐏𝐑𝐄𝐎𝐂𝐔𝐏𝐀𝐂𝐈Ó𝐍

𝐀𝐝𝐞𝐥𝐚𝐢𝐧𝐞 𝐦𝐢𝐫ó 𝐟𝐢𝐣𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐬𝐮 𝐫𝐞𝐟𝐥𝐞𝐣𝐨, mientras arreglaba las arrugas de su vestido con sus manos

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𝐀𝐝𝐞𝐥𝐚𝐢𝐧𝐞 𝐦𝐢𝐫ó 𝐟𝐢𝐣𝐚𝐦𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐬𝐮 𝐫𝐞𝐟𝐥𝐞𝐣𝐨, mientras arreglaba las arrugas de su vestido con sus manos. Regresaría a la escuela por primera vez desde el fiasco del oro y no estaba segura de querer enfrentar esa realidad. Ya era bastante difícil ver a los Cuthbert sabiendo que habían perdido mucho dinero por culpa de ella y su familia, no estaba lista para ver al resto de las personas que su linaje arruinó.

Pero ella no tuvo otra opción. Anne ya se estaba preguntando por qué tuvo una pelea tan grande con Sam, no podía complicar más las cosas.

Sacudió la cabeza suavemente, regresando al planeta Tierra, mientras tomaba sus libros del escritorio y bajaba las escaleras. Se sorprendió cuando no encontró a Anne esperándola tal como había dicho que haría. Ella frunció el ceño y caminó hacia la cocina, pero no encontró absolutamente nada.

"¡Está aquí!" La puerta estalló de repente, un remolino de pelo rojo entró rápidamente en la casa. Adelaine se giró sorprendida y se llevó una mano al pecho cuando encontró a Anne corriendo hacia ella y abrazándola. "Te dije que te respondería". Susurró junto a su oído, antes de alejarse con la más grande de las sonrisas. "Mira mira".

Anne colocó un sobre blanco sobre sus manos, haciendo que el corazón de Adelaine se detuviera por un momento, ya que ya imaginaba de quién era. Sintió que su mejor amiga la miraba atentamente mientras esperaba que la abriera, pero Adelaine se sintió congelada en el tiempo. ¿Y si le estuviera diciendo que volvería? ¿Y si no lo fuera? No sabía cuál le gustaría más, pero en ese preciso momento ambas respuestas la aterrorizaron.

"Vamos a llegar tarde a la escuela". Fue lo único que dijo Adelaine, guardando rápidamente la carta entre dos páginas de su libro y esquivando a una sorprendida Anne que la miraba con la boca bien abierta.

"¡¿Qué?!" Exclamó, dándose vuelta y siguiendo a Adelaine hacia la puerta. "¡¿No quieres saber lo que te escribió?!"

"Honestamente... no." Ella respondió, disminuyendo el paso para que Anne pudiera alcanzarla, lo cual hizo rápidamente. "Al menos no en este momento".

"Pero... pero no entiendo". Murmuró Anne, parándose justo frente a ella, caminando hacia atrás para no frenarlas, Adelaine suspiró fuertemente ante el comportamiento insistente de su amiga, mientras sacudía levemente la cabeza. "¿Por qué no quieres saber lo que te dijo?"

"¡Porque!" Adelaine exclamó exhausta. La verdad era que Adelaine no tenía una razón real para no querer leer esa carta. Sí, estaba enojada con él, pero esta vez era otra cosa. Incluso si no quería admitirlo, una pequeña parte de ella quería que él regresara, y no estaba lista para enfrentar el hecho de que probablemente esa carta expresaba que él no lo haría. No iba a ser rechazada dos veces por el mismo hombre. "¿Por qué eres tan inflexible en dejar pasar esto?"

𝐏𝐑𝐎𝐌𝐈𝐒𝐄𝐒 | 𝐆. 𝐁𝐥𝐲𝐭𝐡𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora