𝐏𝐑𝐎𝐌𝐈𝐒𝐄𝐒 | 𝐆. 𝐁𝐥𝐲𝐭𝐡𝐞

|𝐂𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝐍𝐈𝐍𝐄: 𝐁𝐀𝐃 𝐈𝐍𝐅𝐋𝐔𝐄𝐍𝐂𝐄𝐒|

N/A: Por favor, voten y comenten, eso ayuda a que otras personas lleguen a la historia. Espero les guste el capítulo de hoy . Besos <3

|𝐂𝐀𝐏Í𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐍𝐔𝐄𝐕𝐄|

𝐌𝐀𝐋𝐀𝐒 𝐈𝐍𝐅𝐋𝐔𝐄𝐍𝐂𝐈𝐀𝐒

"𝐓𝐢𝐞𝐧𝐞𝐬 𝐮𝐧𝐚 𝐢𝐧𝐯𝐢𝐭𝐚𝐜𝐢ó𝐧". Adelaine se dio la vuelta sobresaltada y encontró la figura de su hermana recostada contra el marco de la puerta.

"Me asustaste hasta la muerte, Sam". Exclamó colocando una mano sobre su pecho mientras respiraba profundamente.

"Y yo que pensé que te alegrarás de verme". Dijo ella juguetonamente. Adelaine negó dejando caer el libro que estaba leyendo sobre el colchón y se levantó de la cama, caminando hacia su hermana.

"Lo estoy, siento que ya no te he visto en mucho tiempo". Expresó con tristeza, cerrando el espacio entre las dos y dándole un rápido abrazo.

"Lo hago y lo siento". Le froto la espalda maternalmente. "Hay un paciente en la clínica, está muy enfermo y lo estoy cuidando". Explicó, dando un paso atrás de su abrazo y colocando sus manos sobre los hombros de su hermana pequeña

"Entiendo, no tienes que disculparte". Dijo con una sonrisa de lado.

Samantha llevó una de sus manos a la mejilla de su hermana, acariciándola ligeramente, mientras miraba a Adelaine. No podía entender cómo había crecido tanto. Recordó el día en que sus padres la trajeron a casa del hospital como si fuera ayer, y odiaba saber que estaba sufriendo, pero que nunca le diría lo que le estaba pasando.

Porque ese era el mayor defecto de Adelaine. La vida la había obligado a ser esta chiva, que no confía en nadie y nunca se acerca demasiado, y Sam no podía culparla por ello. Había sufrido, sí, pero Adelaine había sufrido diez veces más que ella. Era tan joven y actuaba como una adulta. Esta no debería ser su vida y Sam odiaba no poder retroceder el tiempo y salvarla de su trágico pasado. Pero ella no podía hacer eso.

"No tienes que ser tan comprensiva, ¿sabes? Puedes enojarte".

Adelaine puso los ojos en blanco ante lo rápido que su hermana cambió la conversación hacia sus sentimientos. Adelaine esto, Adelaine aquello. Se te permite sentir esto, se te permite sentir aquello. Estaba cansada de que la gente intenta analizarla una y otra vez.

"Créeme, me sobra locura". Dijo con amargura, dándose la vuelta, caminando hacia la ventana.

Sus ojos se centraron en el paisaje blanco frente a ella, la nieve comenzaba lentamente a cubrir todo a su alcance, la frialdad del invierno congelaba a Avonlea y le daba una sensación de pureza. Las calles de tierra estaban completamente vacías, ni una alma las usaba para moverse a la ciudad, lo cual no era impactante. La mayoría de las familias se quedaron adentro, decidiendo no enfrentar el horrible clima.