Capítulo: Rubí.

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La distancia no hace el
desamor si contigo estoy mejor.

Cafuné - Micro TDH.

🗓️Lunes 17 de Enero del 2028.🗓️

Narra Rubí:

—¿Lista?— me pregunta la obstetra amable y asiento nerviosa. —Es normal estar nerviosa, eres primeriza en esto y entiendo que tengas miedo. ¿Qué quieres? ¿Verlo o escuchar su corazón?—

—¿Ya se puede escuchar su corazón?— pregunta Hanma a mi lado ya que quiso acompañarme.

Es la segunda ecografía que me hago, todo está en orden por suerte pero no puedo evitar los nervios y el miedo de que me digan que algo no está bien.

—¿De cuantas semanas estás?— me pregunta.

—Casi catorce.— tres meses y ya se me nota un poco el embarazo.

Al llegar a Argentina mi tío Elías me recibió y si se sorprendió bastante al verme, no le dije del embarazo hasta unas semanas después aunque lo sospechaba por la enfermera que llegó con nosotros, fue en vano ocultarlo. A mamá también se lo conté a las semanas y se emocionó muchísimo pero si se enojó cuando le dije que no quería que Kazutora lo supiera pero de todas formas me prometió que no le diría. También le conté a Chris quien lloró mucho.. demasiado.

En el avión le pedí a Hanma que borrara mis redes sociales y al llegar cambie mi número de teléfono ya que no quería.. bueno es obvio lo que no quería.

Decidí no recordar... lo que pasó. Me enfoqué en el embarazo y en mis estudios ya que necesito distraerme. Me decidí por estudiar paisajismo arquitectónico y estoy estudiando idiomas con mi tío Elías quien es mi profesor. Es profesor de idiomas solo que no lo ejerció cómo es debido porque le gustaba más el campo pero quería aprender distintos idiomas como mamá. Es mi profesor y el de Hanma a quien le ha enseñado a hablar y entender el español a la perfección aunque Hanma quería aprender insultos argentinos.

Hanma a pesar de ser un idiota más ha sido de mucha ayuda ya que no me ha dejado sola en ningún momento y está al pendiente de mí y mi bebé y nuestros antojos a media noche.

Hanma decidió hacer una carrera de fotografía profesional ya que le apasiona y es mi fotógrafo personal quien le saca fotos a mi avance en el embarazo. Para navidad le regalé una cámara profesional y les juro que casi llora.

—Bueno a veces puede escucharse un poco más tarde pero no es para preocuparse.— explica amable la doctora.

—De acuerdo intentemos.— le pido y prepara el aparato para escuchar los latidos del corazón del bebé, me coloca un gel frío en el abdomen y Hanma toma mi mano la cual tomo con fuerza por los nervios.

Coloca el aparato en mi abdomen comenzando a moverlo esparciendo el gel y por minutos no escucho nada, por más que era normal el no escucharlo no puedo evitar mi miedo.

—Perdón no le puse volumen.— se disculpa apenada y doy un suspiro largo. —Que vergüenza.—

—No se preocupe, un error lo comete cualquiera.— le digo amable aunque si me dan ganas de golpearla.

Es que ¿Cómo se le ocurre? ¿Dónde sacó su título para que lo devue-..

Pum..

El latido me saca de mis pensamientos haciéndome ver la pantalla del monitor.

Son.. son los latidos de mi bebé, los latidos de mi pequeño porotito. Los escucho y.. y me emociono hasta llorar de la alegría. Cuando me enteré del embarazo no quise verlo porque tenía miedo y ahora me emociona asistir a las citas con la obstetra, bueno es la segunda a la que asisto desde ese día.

Esta Vez Para Siempre - Kazutora Hanemiya Donde viven las historias. Descúbrelo ahora