Un pequeño daltónico y uno ciego. Un duo dinámico de mejores amigos que crearán su propio mundo de colores
O...
La historia de dos amigos de la infancia que vuelven a encontrarse años después donde las cosas cambiaron bien cabron.
SANWOO (SAN TOP...
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Nadie sabía lo que pasaba por su cabeza, nadie.
Decían que la adolescencia era la época de oro, donde eras libre y todo parecía estarse acomodando, una etapa en la cual comenzabas a madurar, a ver por tu futuro, en la cual eras más feliz.
Pero nadie sabe, que la adolescencia es la peor etapa que ha vivido hasta ahora. ¿Cuándo se va a terminar? ¿Cuándo se va a acomodar todo hasta sentirse tranquilo?
Porque nadie sabe lo que sucede cuando se encierra en su habitación, buscando un lugar seguro, nadie sabe porqué no habla con nadie, piensan que es inmaduro y que tiene que crecer mentalmente si o si.
Desgraciadamente se ha encontrado en una sociedad donde no le dan la importancia suficiente a los problemas mentales de una persona. Nadie sabe las inseguridades que se generan en sí mismo al verse al espejo, nadie sabe el asco que llega a tenerse y el poco valor que se otorga.
Pide ayuda y piensan que pide atención, llega a casa lleno de golpes y el cuerpo hecho mierda y a sus cabezas llega la idea de que se ha metido en su propia película adolescente, y que pronto pasará. Es verdad, es su culpa por tomarse tan enserio las palabras dolorosas de los demás, es su culpa tomarse tan a pecho el rechazo que ha recibido, es su culpa que los demás lo vean como un objeto en el cual gastar dinero a cambio de algo tan primitivo.
Es su culpa, lo admite, es su culpa todo lo que le ha pasado. Quiere ayuda, pero le vuelven a decir una y otra vez que son sus problemas y como alguien ya casi adulto, debe resolverlos por su cuenta.
No puede, se siente ahogarse con el pasar de los días, siguiendo esa rutina que le quema los huesos y le hace sumergirse en un autodesprecio que poco a poco lo está destruyendo.
¿Cómo puede pedir ayuda sin sentirse juzgado? ¿Cómo puede arreglarlo si no tiene la seguridad de que alguien lo apoyará en todo momento? ¿Cómo podría evitar que la gente siga pensando que quiere sólo un poco de atención?
Porque nadie sabe lo que hay dentro de la cabeza de Jung WooYoung y piensan que sus problemas de adulto maduro y responsable son más importantes que los de un adolescente con el deseo de desaparecer.
Nadie sabe porqué WooYoung quiere huir.
Habría esperado más tiempo en casa de San, pero los diez minutos que pasaron se volvieron en una hora, después en dos y seguía sin aparecer. Eventualmente llegaría la madre del moreno y no quería seguir ahí cuando Soyeon le había dicho claramente que tendría que irse el sábado. Así que antes de irse llamó a San para decirle que se iría a casa pero nunca le contestó, le envío un par de mensajes pensando que luego los leería, y después decidió irse a su casa.
No supo nada hasta el siguiente día.
Llegó corriendo hasta el hospital encontrando a Soyeon con su esposo tomando un café en la sala de espera, miró hacia todos lados y sin prestarle atención a las miradas que la familia Choi le dedicaron, se acercó a la recepcionista. La mujer alzó la mirada, tan acostumbrada a su trabajo que no le sorprendió ver a alguien alterado pidiendo información, lo que si la extrañó un poco fue ver a un adolescente, uno desesperado y que pareciese salir recién de sus 48 horas encarcelado por lo cansado y ojeroso que se encontraba.
