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- La luna iluminaba las calles del infierno estando varíos demonios pecadores caminando o matandose entre ellos algo que era muy común en el infierno. El Demonio de la Radio y el ángel caído estaban juntos sin decir ninguna palabra, un silencio totalmente incomodo para ellos, Lucifer no entendía porque sus mejillas  cada vez estaban ruborizadas y tampoco sabe porque se encontraba tan nervioso cuando estaba cerca de Alastor quién se encontraba tranquilo y sonriendo de costumbre.

- Ambos se dirigieron al barrio Caníbal algo que Lucifer se sentía intrigado en saber porque ambos estaban ahí, Alastor le pidio al rubio que lo siguiera y este solo le hizo caso.

Lucifer: ¿Por qué estamos aquí? - Miraba a los caníbales que estaban a su alrededor siendo un poco amigables y saludando cada que los miraban.

Alastor: ¡Pues vengo a ver a una muy gran amiga mía! ella es encantadora le va a caer muy bien mi señor - Responde a su pregunta aún con su tipica sonrisa pero esta era cada vez más alegre.

Lucifer: Mmm... - Suspira un poco para continuar caminando al lado de Alastor siguiendolo a dicho lugar.

- Ambos llegaron al sitio donde se encontraría Rosie, ella estaba atendiendo a unos cuantos de sus clientes mostrandose amable con ellos y aconsejandolos.

Rosie: ¡Oh! ¡Pero por mi cráneo pero si es mi gran amigo Alastor! - Ella se acerca con felicidad hacía el más alto sonriendo calidamente. - ¿Que te trae por aquí querido? es raro verte por estas horas

Alastor: Solo vengo acompañando al gran soberano del infierno - Voltea hacía Lucifer. - ¡Majestad ella es la mujer más encantandora de todo el barrio Caníbal! Su nombre es Rosie, querida el es Lucifer Morningstar, padre de Charlie y el soberano del infierno

Rosie: ¡Encantada de conocerlo! Debistes avisarme Alastor asi hubiera podido arreglarme mejor si se trataba del gran Lucifer - Sonríe algo incomoda acomodando un poco su cabello.

Lucifer: ¡N-No se preocupe! solo vengo porque Alastor me lo pidio... me dijo que usted es una gran amiga de el

Rosie: No solo su amiga yo lo ayudo cuando puedo, ayude a su hija cuando sucedió lo del exterminio ¡ella es una chica estupenda! ustedes dos son tan iguales - Dice mientras estaba señalando unos mueblos y asientos para que pudieran sentarse. - ¡Anda sientense ya les traígo un poco de té para platicar!

- Rosie fue y trajo algunos bocadillos de dedos y tres tazas de té dejando todo en la mesita sentandose frente a los dos que estaban sentados en un mueble.

Rosie: Y bien, ¿que tal su noche chicos? ¿como los tratan sus días? - Daba un pequeño sorbo a su taza.

Lucifer: Bien, supongo - Responde un poco incomodo.

Rosie: Valla, jamás pense que el gran soberano fuera tan pequeño... ¡creo que hasta Charlie es más alta que usted! - Ríe un poco dejando su taza en la mesita que tenían al frente.

Lucifer: Jajaja... pues sí (es igual que Alastor por algo son amigos...) - Sonríe forzadamente para tratar de disimular su enojo.

Alastor: Y dime querida ¿no has tenido problemas con tus clientes?

Rosie: De hecho sí, ¡pero adivina que! ¡tengo un montón de chismes que contarte querido Al!

Alastor: ¡Esplendido! Cuentame me da mucha intriga

- Los dos empezaron a hablar entre sí hablando y contando chismes algo que Lucifer presto mucha atención uniendose un poco a su charla.

Lucifer: ¿¡Enserio suceden esas cosas!? jamás creí que en el barrio Caníbal sucedieran ese tipo de problemas

Rosie: Creeme querido todos los días tengo que encargarme de resolver esos problemas dando de mis consejos aunque aveces me pongo en peligro ¡la última vez casi destrozan mi local en una pelea! pero me encargue devorando sus entrañas... - Al mencionar eso muestra una sonrisa escalofriante mostrando sus dientes afilados. - pero aquí casi todo es tranquilo

Alastor: Rosie es muy buena dando consejos Majestad, por algo traje a su hija cuando tuvimos que reclutar el ejercito de canibales para la pelea contra los angeles exterminadores - Tomo un sorbo de su taza. - cierto, pido disculpas mi querida amiga, lamento que varios de los canibales fallecieran en la batalla

Rosie: Tranquilo Alastor, dieron al menos su ultimo festín antes de fallecer - Sonríe un poco. - ¿podría ir por más té Alastor? ya casi se nos acaba, yo me quedo charlando con Lucifer

Alastor: No hay problema querida, vuelvo en un momento - Desaparece entre las sombras dejando solos a Rosie y Lucifer.

- El rubio no encontro una forma de charlar con Rosie, pero ella se adelanto un poco notando su incomodidad.

Rosie: Alteza ¿sucede algo? - Pregunta ella mostrandose preocupada.

Lucifer: Yo... no lo sé - Responde bajando su mirada al suelo sin mirarla.

Rosie: Puede hablar conmigo, soy buena guardando secretos, puedo ayudarlo si usted lo desea - Se levanta y se sienta con  el poniendo su mano en el hombro de Lucifer.

Lucifer: No se como decirtelo, son un mar de emociones que tengo... primero no me siento bien ultimamente, cada que recuerdo a mi ex esposa un nudo en mi garganta aparece, aguanto mis ganas de llorar y dejar esos horribles pensamientos de culpa que tengo...

Rosie: Digame, ¿que es lo que siente cada que recuerda a su ex esposa?

Lucifer: Pues... creo que dolor y culpa... ella era la mujer de quién me enamore cuando la conocí, prometí ser el mejor esposo para ella y tener una familia sana en la que nosotros dos pudieramos vivir felices con nuestra hija Charlie... pero creo que no fue así... durante un tiempo ella dejo de hablarme y evitaba que mi hija se acercará a mi... por mi mala suerte ella un día desapareció dejandome solo... tuve que criar a Charlie y ahora que puedo tener una mejor relación con mi manzanita... siento que no sere el mejor padre para ella ahora...

Rosie: Alteza... escucheme, no deje que ese dolor lo invada por completo, usted es un gran padre para ella y estoy segura que ella también desea ser una mejor hija para usted, cuando la conocí fue muy encantandora conmigo, es una chica muy amable y soñadora igual que usted Lucifer - Sonríe un poco. - trata de dejar ir ese dolor y buscar algo nuevo, esta desperdiciendo la oportunidad de tener una mejor vida asi que no la desaproveche

Lucifer: S-Señorita... usted es mil veces mejor que el idiota de Alastor... - Ríe un poco y trata de calmar sus ganas de llorar. - gracias por su consejo, puede que venga más seguido

Rosie: ¡Pues no hay problema con gusto lo acepto en mi humilde local! - Le da una palmaditas para luego levantarse. - y si necesita más consejos con gusto Alteza

Alastor: ¡He vuelto! - Aparece de la nada con una tetera. - traje más té tal y como pedistes querida

Rosie: ¡Oh pero que bueno! Gracias Alastor

Alastor: No hay de que - Fue a poner la tetera en la mesita sentandose de nuevo al lado de Lucifer. - ¿Que tal todo con Lucifer?

Rosie: Muy amigable, igual que su hija

Lucifer: ¡Jejeje! - Ríe un poco mostrando una sonrisa de alegría. - me encanto conocer a Rosie, te lo agradezco Alastor me levanto mis animos

Alastor: Solo quise que usted tuviera una noche tranquila Majestad, terminemos aquí y volvamos, no deseo que su hija se termine preocupando por nosotros

Lucifer: Tienes razon... - El sonrojo de sus mejillas volvió nuevamente algo que pudo notar Rosie de inmediato.

- Luego de un rato más los dos se despidieron de ella alejandose de su local estando ambos alegres y conversando mientras se iban.

Rosie: Estoy segura que esos dos tendrán algo... - Dice para luego entrar a su local con una sonrisa.

🌻 Manzana Dorada 🌻 《RadioAplee》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora