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-He sido una idiota. -Lloró tumbada con la cabeza sobre el pecho de Salma. -Tenías razón.
-No quería tener razón.
-Lo sé. -Suspiró. -Lucas no va a dejarla.

Salma la acarició el brazo.

-Lo siento.
-Llevan 4 años juntos, es normal que no quiera romper.
-Lo que no es normal es que juegue contigo, Naiara. Simplemente está mal.

Naiara se incorporó para quedar sentada y poder mirarla a los ojos.

-El otro día te mentí... En la fiesta no me lié con un tío en los baños.
-Ya, me di cuenta. ¿Qué pasó entonces?
-El camarero del bar... -Se mordió el labio inferior nerviosa. -Intentó...
-¿Intentó qué? Nai, dímelo de una vez.
-Ya sabes...
-No, no sé. Tendrás que ser más específica.

-No es nada fácil decirlo en voz alta.
-Me lo imagino.
-No, créeme que no.
-Vale. Si no estás preparada lo entiendo, no tienes porque decírmelo.
-En realidad, necesito hacerlo. Sé que sí.
-De acuerdo. No voy a juzgarte, solo dilo sin pensar.

-Intentó violarme. -Soltó bajando la mirada a su regazo.

-¡¿QUÉ?!
Salma se levantó de la cama llevándose las manos a la cabeza.

-Es heavy, lo sé...
-¡¿Heavy?! ¡Esto es mucho más que heavy!
-Salma, por favor... tranquilízate, me estás poniendo más nerviosa.
-Tienes razón, lo siento. -Se acercó a ella para abrazarla. -Joder tuvo que ser horrible.

-Lo fue pero por suerte apareció Lucas.
-Pues sí, menos mal. Aunque me gustaría que me dijeras quién era ese camarero, por hacerle una visita y eso.

Naiara se encogió de hombros.

-Ni siquiera lo recuerdo. -Mintió. Había tenido pesadillas con él, se acordaba perfectamente de como era. -Pero no te preocupes, Lucas le dio su merecido.

-Es difícil, ¿verdad?
-¿El qué?
-Construir un muro entre vosotros después de todo lo vivido, de todo lo que ha hecho por tí.
-Sí, supongo que sí. Pero no puedo seguir pasándolo mal. En este caso, querer no es suficiente.

***

Los ensayos de la gira llegaron.

El momento más temido de Lucas y Naiara.

Corazón hambriento, dime e historias por contar iban a la gira. Tendrían que compartir muchos ensayos juntos.

-¡Lukiiiiii!
Alex se colgó de él como si fuera un koala.

-Al parecer amaneciste cariñoso.
-Es que llevábamos mucho sin vernos. ¡Qué ganas de compartir momentos juntos los 16 otra vez!

Lucas sonrió tenso.

-¿Qué tal con Denna?
-Mejor imposible, tío. Ayer pasamos un día increíble los dos solos.
-Se te nota reenganchado, boludo. Que suerte que tenés.
-La tengo. Estoy taaaaaan enamorado. -Le puso una mano en el hombro. -Sé que lo hice mal pero no pude evitarlo. El amor funciona así, supongo.

-Naiara y yo tuvimos una discusión bastante fuerte hace unos días, no hemos vuelto a hablar. -Le contó sin poder callárselo más.

Alex lo miró sorprendido.
Lucas nunca había hablado de Naiara con él, no así al menos. Aceptando sus sentimientos.

-Lo solucionareis.
-No lo sé, boludo. Lo cierto es que la cagué remal.
-Pues este es tu momento para solucionarlo. Si no, créeme, te arrepentirás.

-Tengo claro que cualquier cosa que haga o diga, me parecerá mal luego.
-¿Por qué dices eso?
-Pues porque sí, porque se me fue de las manos. Ha pasado algo que no tendría que haber pasado.

-Pues no sé que vas a hacer, tío. Pero Naiara ya está aquí.

Lucas tragó saliva nervioso.

-¿Y qué hago, boludo? ¿Acercarme? ¿Huir?
-No, huir ya no puedes huir. Te ha visto al entrar, sería demasiado obvio.

-¿Lucas? -Salma lo tocó el hombro para que la mirara. -Ten. -Le dio el micrófono. -Os toca ensayar corazón hambriento.

Le lanzó una mirada significativa y a Lucas casi se le cayó el micrófono de lo nervioso que se puso.

-Em... gracias.

Caminó hacia el escenario a pesar de que le habría encantado salir corriendo.

Naiara ya estaba comprobando si su micrófono funcionaba correctamente y ni siquiera lo miró cuando se colocó junto a ella.

-Estás preciosa. -Le susurró sin poder evitarlo queriendo llamar su atención.
-Tienes que colocarte al otro lado del escenario.

Finalmente, sus ojos conectaron con los de él.

-Sí, sí claro.
Se alejó aún con su mirada puesta en ella.

Naiara asintió hacia Noemí para que la música comenzara.

Al principio todo iba bien, ambos supieron mantener la compostura y fingir que todo estaba bien a pesar de todo.

Pero cuando tuvieron que acercarse, la tensión y los nervios les pudieron, sobre todo a ella.

Naiara acabó apartándose de Lucas cuando este la tomó de la cara en "y un beso que nos salve".

-Lo siento.

Noemí corrió hacia ellos.

-¿Qué pasa?
-No puedo hacerlo, lo siento.
-Naiara, cariño...
-No puedo.

Sintió que la faltaba el aire.

-Vale. Lo primero respira.

-Esto es insoportable.
-Lo sé, cielo. Pero yo sé que sí que puedes. -La acarició la mejilla. -¿Por qué no vas a qué te dé el aire mientras Lucas ensaya con Bea y después vuelves? Tómate tu tiempo.

Naiara asintió.

-Gracias, Noe.

Salió corriendo hasta llegar a la calle.

Por supuesto, se quedó en una zona cerrada al público.
Adoraba a sus fans pero necesitaba estar a solas.

-¿Todo bien?
-Sí, sí claro.
-Nayi...
-Vale, es verdad. No estoy bien.

-Es normal. -Denna se acercó y pasó un brazo sobre sus hombros. -Lucas es un chico increible, pero no se ha portado bien contigo. Por eso estás así.
-Creía que cuando saliéramos todo sería diferente. Me ha prometido tantas veces que lo dejaría con Claudia que yo... lo creí. Y ha resultado ser mentira.

-Lo siento muchísimo, Naiara. El comentario que te hice aquella vez en la academia... fue muy desafortunado.
-Pero tenías razón.
-Eso da igual. Solo conseguí hacerte más daño, aunque no me lo digas yo lo sé.

-No te culpes, ¿vale?
-Lo mismo te digo. El que ha hecho las cosas mal ha sido Lucas.
-Pero yo tendría que haberlo parado.

Denna negó.

-Te enamoraste, Nayi.

-Lo sé. -Naiara se apartó las lágrimas con los dedos. -Pero esto tiene que acabar. No puedo permitir que perjudique a mi carrera ni a la gira ni a vosotros.
-¿Y qué vas a hacer?
-Lo que hice con Mario. -Sonrió de medio lado. -Construir una coraza a mi alrededor e impedir que vuelvan a romperla.

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