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🔥CAPITULO 35🔥

Bastien.

Saco rápidamente de la pantalla la imagen que estaba viendo hacía más de una hora, había estado observando a la mujer más hermosa que había pisado esta tierra durante toda mi vida, pero ahora que se movía estaba eufórico por el reto que suponía hackear cada cámara que estuviera al alcance de ella para verla.

En este momento el mal humor por perderla de vista estaba haciendo mella en mí tan rápido que fue casi instantáneo, sin embargo me vi obligado a esconderlo por qué la persona que entró y me hizo perder de vista a mí obsesión me estaba mirando con nada menos que urgencia en sus ojos.

Suspiro, puedo perderla de vista media hora.

Creo.

Jerome: Necesito que hackees la cámara de un sitio, pero que te asegures de que no se den cuenta y no dejes rastro.

Bastien: Ese es exactamente mi trabajo aquí Jerome.

Ruedo los ojos, no diré que somos enemigos jurados, tampoco mejores amigos, pero nos llevamos bastante bien, especialmente porque él hace el mismo trabajo que yo, solo que se movió a un lado para dejármelo a mí.

Le agradezco por eso, la conocí a ella y no tuve que alejarme de mi gemelo, dios sabe que hubiera sido de él si estaba solo, con una madre como la nuestra siempre en su contra podría haber terminado peor de lo que está.

Empiezo a teclear metiéndose al sistema de seguridad del lugar que él me indicó, no voy a negarlo, me costó un poco, el hacker que tienen allí es muy bueno, pero yo soy mejor.

Frunzo el ceño cuando las cámaras me muestran al boss en una reunión con…

Bastien: ¿El consejo?

Jerome: Ahora bien chico, esto será un secreto entre tú y yo, si alguien más se entera que estamos viendo esto nos mataran y a tus amigos también.

Ruedo los ojos.

Es innecesario que me diga todo lo que podría pasar, sé perfectamente el riesgo que estamos corriendo y lo herméticos que tenemos que ser en esta situación.

Ambos préstamos total atención a la pantalla luego de cerrar la puerta con seguro, nos ponemos un auricular cada uno porque ni de broma iba a dejarme con la curiosidad de saber que dicen.

Jerome: Respira menos fuerte que no escuchó, ¿Tienes putos problemas de pulmones o que?

Bastien: Estoy respirando normal, ¿estás tan viejo que ya se te arruinó el oído o que?

Nos ignoramos mutuamente y nos concentramos en lo que pasa del otro lado de la cámara.

El boss llega y lo guían hacia el salón principal, en este hay siete hombres sentados alrededor de una mesa redonda mientras que las que supongo que son tres de sus esposas están sentadas en los regazos de algunos de ellos, parecen tan cómodos entre ellos, como si fueran todos familia, lo cual al parecer es así ya que uno se inclina hacia la mujer en el regazo de otro hombre y le da un beso en los labios antes de sentarse derecho cuando le avisan que el boss llegó.