One-shot's de todo tipo

los héroes en pijamas 3#

2_Strawberry_9 >:3

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Conoser a los demás fue divertido y también algo confuso, le encantó pasar el tiempo con Dragfir, Mei y MK, a demás de que Red Son fue alguien muy interesante. El carácter de Pigsy era tosco y duro, pero de alguna forma se lograba ablandar y mostrar una sonrisa llena de cariño, Tang fue insistente tal y como se lo dijeron, pero le agrado, y Sandy casi se vuelve su favorito si no hubiera sido que se dijo a si mismo que no tendría favoritos.

Convive mayormente con Macaque debido a que se la pasa en la casa de Asahi, así que no hubo muchas sorpresas con él.

Solo le faltaba Ne Zha y Wu-Kung, debido a que el celestial tenía trabajo tocó visitar al mono, y la verdad fue muy extraño.

Estaba con los minutos, acariciando sus cabezas o mentones, intentando de que ninguno se pusiera intenso por querer mimos. Merian se había ido a buscar a Wu-Kung, está vez confío y decidió esperar, entreteniendose con los chillidos y los juegos de los minutos, también las mini peleas entre ellos por obtener mimos, era divertido.

Hasta que se volteo al sentir una mirada fija en su nuca, enarcando una ceja al notar al mono de cabello dorado y vestimenta suelta, similar a un pijama. Los ojos dorados chocaron con los suyos de tonalidades moradas, notando como los ojos del dios se abrían un poco más.

–Huele a duraznos y moras... y bosque– Murmuró para sí el mono, sin dejar de mirarlo –Huele a fresas y calabazas... Y a crayones... Él... Es... Alexis– Wu-Kung ladeó la cabeza, pudiendo reconocerlo no solo por su apariencia, sino que también gracias a la descripción de olor que le dió Macaque, si no hubiera sido por eso probablemente lo hubiera sacado de su montaña.

De alguna forma sintió algo ajitarse en el fondo de su mente, conosia la historia del menor, y pensó que se lo tomaría mejor al verlo, pero ahora solo tenía una cosa en mente.

Se equivocó muchas veces, pero no lo haría con él.

Su cola se ajito levemente mientras caminaba hacia él, su pelaje apenas erizandose ante la mirada llena de curiosidad y algo más brillando en sus ojos que le dedicaba el pequeño, sus monitos se miraron entre ellos, reconociendo el comportamiento y empezando a chillar emocionados. Lograron de alguna forma levantar a Alexis, empujándolo hacia el mono que apresuró el paso.

–E-eh, che, tranquilos– intento no tropesara, solo para después sentir como su cuerpo chocaba con el del mayor, levantó la mirada confundido, notando el brillo extraño en los ojos ajenos –Eeeh ¿Hola?–

–Hola pequeño– saludo con una sonrisa, empezando a cargar al menor y sentándose, dejándolo en su regazo –Tu nombre es Alexis ¿No?– ladeó la cabeza, sin dejar de abrazarlo mientras su cola se movía con emoción apenas contenida.

–Sí– asintio dudoso, mirándolo extrañado mientras sentía el olor ajeno comenzar a intensificarse, llegando a ser un poco empalagoso. –El tuyo era Wu-Kung– el mono tarareo, sintiéndose feliz mientras el más pequeño parecía acomodarse, dejándose abrazar.

Eso lo emociono un poco más, su cola movienos con total emoción mientras resfregaba su mejilla contra la cabeza ajena, comenzando a ronronear. Alexis lo miro extrañado, apenas pudiendo reconocer su comportamiento. Asahi se había comportado más o menos parecido, siendo un poco más cariñoso mientras lo reclamaba como su cachorro.

¿Otro padre? Eso era raro, encima un dios.

Aún así, se quedó quieto, permitiendo ser reclamado mientras sentía a algunos monitos acurrucarse en su cuerpo. Escucho el suabe tarareo del mono, convirtiéndose en un ronroneo constante y sonoro mientras se valanceaba de un lado a otro.

Se rió divertido, empezando a tararear al ritmo del ronroneo ajeno, sintiendo como el peso de su cuerpo lentamente empezaba a ser más notorio sobre el suyo, claramente el mayor estaba comenzando a relajarse demaciado encima suyo.

Realmente no le molesta ya que está acostumbrado a cargar con peso muerto, así que él no fue un problema. Y la verdad, se sintió bien estar rodeado de tantos, includo si estaba medio apretujado entre ellos.

Merian simplemente grabó, aguantando los chillidos internos que luchaban por escapar, su pequeño y más reciente hermanito estaba siendo aseptando por el dios, incluso reclamado, era lo mejor del mundo.

Y Asahi explotaría de emoción cuando se enteraran.

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Lamento que sea tan corto y con poco entusiasmo, es que me distraigo si hay mucho ruido a mi alrededor y pues... No sale tan bien, aún así, espero les allá gustado