NO DEJES QUE APAGUEN TUS SUEÑOS.

22.- Meridiana

KIMBERLY

Mayo del 2023.

Solo espera,
no te apresúres,
volverás a brillar
como las estrellas y está
vez, nadie podrá apagarte.

Perder a alguien no ha sido fácil sobrellevarlo y mucho menos echarlo de menos.

Han pasado cinco meses desde que él se fue, no ha sido fácil.

El sol se ha ido y no ha regresado.

Hay veces en las que me siento en el portal, esperando a que llegué, para que vayamos a hacer alguna locura, pero hasta el momento no ha llegado.

Desde que él se ha ido, nada en mi ha vuelto a ser igual.

Se que debería pasar página, pero es imposible, no puedo hacerlo, no quiero perderlo de mi mente, también.

Escucho música desde el móvil mientras leo en digital el libro Antes de diciembre.

Una chica me lo ha compartido y para ser sincera no he podido dejar de leerlo, según la chica, este libro fue publicado antes en una App llamada Wattpad. Me ha llamado la atención, aunque no he investigado de que es.

Apagó el móvil cuando lo he terminado.

La App me ha llamado la atención, quiero saber qué es.

Me levanto de golpe, cojo el móvil, voy y me siento en la silla giratoria, descargo la App.

Una vez hecho, hago la cuenta y me sorprendo al ver que ahí encuentro un millón de historias de manera gratuita, exploró la App y me llevo una sorpresa al ver que también yo puedo crear una historia.

Dejó el móvil de golpe, por qué eso me recuerda a Ale y a algo que jamás pienso hacer.

Tomó mi sudadera y salgo de casa.

★←🌟∞🌟→★

Desdé que descargué esa App, he sentido un cosquilleo en los dedos, quiero hacerlo, pero a la vez no.

Acostada en la cama con los brazos extendidos, miro el móvil, que reposa en mi escritorio, se enciende una y otra vez.

Quiero hacerlo, pero a la vez no.

Tengo miedo, miedo de que me rechazen y me digan que lo que escribo es una mierda. Y la persona que me animaba, ya no está.

«—Promete que escribirás esa historia.»

Susurra una voz en mi cabeza.

Me levanto y me siento frente al escritorio.

«—Lo prometo.»

Abro la App y presionó el lápiz.

No se que hacer...

Coloco el nombre, sin descripción. Después me pide escribir la primera parte. Escribo la dedicatoria de golpe sin pararme a pensar.

Mis dedos presionan las teclas de una manera impresionante.

Paso por el capítulo uno, le coloco título, pero no sé qué escribir.

Me pongo los cascos, esperando que eso me ayude a inspirarme.

Doy vueltas y vueltas, pensando que escribir.

«Si no sabes que escribir… Escríbe un libro… donde seamos tu y yo en otra vida.»

Las palabras de Ale invaden mi mente, es como si le dieran respuesta a mis preguntas. Night changes de One Direction suena de fondo. Lo cual me hace recordar esa tarde.

Aclaro mis ideas, pensando en que escribir primero, anotó las ideas en una libreta.

Me impresiono al ver como las ideas surgen sin necesidad de torturar a mi cabeza.

Cuando ya tengo listo todo empiezo a escribir.

Escribo esa historia.

Aquella historia, en la que Ale y Kimberly fueron Edwin y Arzul.

En otra vida, donde ellos si pudieron estar juntos.

Esa historia que le pertenece a él...