LUXURY NIGHTS

Capítulo 8

Sus manos estaban apretadas, sus labios finos en una línea sellaban las ganas de maldecir, sentía que contenerse iba a ser evidente pero no podía evitarlo. De frente al hombre que estaba riendo y burlándose de ese país peculiar le ponía la sangre a hervir, lamentablemente estaba atado de manos y pies.

Si daba aviso a Guatemala seguramente sería el primer sospechoso, además sabía también que su presidente tenía dudas sobre como Guatemala había conseguido el dinero a tiempo, ¿no era sospechoso? Seguramente también sospecharía de él.

Bufó y cruzó una pierna sobre la otra, mirando a la ventana, el exterior estaba frió y húmedo. Su corazón se estrujó y el vacío que se formó en su estómago estaban matándolo.

Parpadeó, sus pestañas batiendose suavemente, como un aleteo de mariposa, quién sabría que justo en ese momento, cosas terribles sucedían en otros lugares.

Esta vez no podría hacer nada, sabía que Guatemala de todo modos no tenía fé en él y desconfiaba como ovejas de los lobos, lamentablemente eso también sería como un doloroso apoyo.

Guatemala era un país pequeño, pero el hombre era fuerte y decidido, un hombre que no dudó en poner todo en fuego mientras preparaba el balde con agua, sabía que era lo suficientemente fuerte como soportar un ataque sorpresa, y si se lo esperaba como dejaba a ver, estaría preparado, ¿no es así?

La culpa estaba matándolo.

― Tienes mala cara.― Escuchó el torpe español de su líder y volteó a verlo con una bonita sonrisa.

Estados Unidos: Me perdí el almuerzo.― Respondió rascando su mejilla suavemente.

Hubo un pequeño silencio mientras USA reprimía las ganas de darle una buena paliza al presidente, debatiendose en tirar todo a la borda.

Por otro lado los ojos encendidos en un astuto brillo que observaban a USA sonrieron levemente. El humano se relamió los labios mirando de arriba abajo al chico frente a él y se rió entre dientes.

― Vamos a comer.―

Ordenó mientras ladeaba su cabeza, desde su lugar USA parecía un pobre chico perdido en sus pensamientos, tan hermoso como un modelo de revista, con esos ojos preciosos y esa sonrisa encantadora. Se puso de pie y se acercó a pasos tranquilos, extendiendo una mano en dirección del otro.

USA salió de sus pensamientos y miró la mano frente a él, por una fracción de segundos su vista se deformó como un flash y la mano frente a él parecía estar manchada en su totalidad de sangre.

Estados Unidos: Iremos a ese restaurante Francés, ya lo sabes.― Rechazó la mano del presidente sin preocuparse y se puso de pie, la diferencia de altura era muy notable.

Le dió la espalda y metió sus manos en los bolsillos de su pantalón empezando a caminar dejando atrás al presidente quien encontró divertido y normal el tosco comportamiento ajeno.

Su mirada solo brilló un poco más mirando la ancha espalda ajena.

――――🪧

Guatemala caminaba a paso tranquilo por la acera, llevando consigo un maletín donde iban sus documentos y también un termo en la otra, ni siquiera pudo beber su café hoy en la mañana. Iba tarde además, odiaba éste día.

Las calles estaban llenas de tráfico, era temprano y la mayoría de personas estaban yendo a su trabajo, él no era la excepción. Vestía de nuevo un traje de etiqueta, su cabello iba suelto y algo desordenado, su creciente barba de días ya era notable y sus ojeras también. 

¿No era como ver a un vagando hacer cosplay de empresario? Aunque el vagabundo tenía ese aspecto seguía siendo un hombre fornido y alto.

Cruzando la esquina alguien chocó con él, el golpe fué tan duro que lo tomó desprevenido provocando que retrocediera torpemente unos pasos atrás.