Lunes.
Los lunes a las 6 de la mañana son mi peor enemigo, pero debo de ir a la escuela. Escuché mi alarma, y creo que la apagué, pero aun así, no me levanté. Sonó otras dos veces y supe que ya era momento de pararme, prendí la luz de mi cuarto y busqué mi uniforme en el armario.
Aún adormilada, logré cambiarme y entrar al baño para lavarme la cara y arreglar mi pelo. Tardé unos 20 minutos haciendo eso, y escuché a mi papá gritar desde las escaleras que me apurara, seguro ya voy tarde. Me perfumé y tomé mi mochila para bajar a la cocina, donde me encontré a mi papá tomando una taza de café.
-¿Y mi desayuno? –dije, después de haberlo saludado-
-No hay. Hoy compraras algo en la escuela.
Le hice una mueca, el almuerzo de la escuela no es muy bueno.
-¿Tienes dinero? –Negué con la cabeza y me dio varios billetes- esto te debe alcanzar para toda la semana.
-¿Toda la semana? ¿Vas a salir? –asintió-
-Estaré fuera de la ciudad hasta el fin de semana, confío en que te puedes cuidar, pero aun así tu hermano estará al pendiente.
-Está bien –tomé una manzana y salí de casa-
El camino a la escuela siempre es silencioso, y me gusta que se mantenga así. Miré a la ventana, admirando el paisaje matutino que la ciudad me brindaba. Llegué a la escuela más rápido de lo que imaginé, tomé mis cosas y bajé, estaba por entrar pero mi papá me llamó.
-Me iré unas horas después de que regreses a casa, pero estaré ocupado, Doyoung pasará por ti. Y por favor, espera a que él llegue, no quiero que vaya a buscarte a casa de una de tus amigas.
-Ok... que te vaya bien –sonreí-
-Gracias Hara, te quiero.
-Yo también te quiero.
Me alejé del carro y arrancó para tomar de nuevo el camino. Entré a la escuela, sin encontrar a mis amigos, supongo que es muy temprano o a mí se me hizo tarde. Me acerqué a mi casillero para guardar lo que no necesitaba y lo que ocuparía para estas primeras horas.
-¡Hara, Hara, Hara! –escuché mi nombre desde lejos y miré a esa dirección, encontrándome con Aeri, solamente le sonreí-
Una vez llegó conmigo, me abrazó.
-¿Por qué tan efusiva? –reí después de separarme de ella-
-Sabes que soy así, pero tengo que preguntarte algo.
-Claro –cerré mi casillero y tomé mi mochila de nuevo-
Tomó de uno de mis brazos y comenzó a caminar, haciéndome hacer lo mismo. Avanzamos un buen tramo y seguía sin decirme nada, casi llegábamos a la cafetería y su silencio comenzaba a resultarme molesto.
-¿Por qué tanta intriga? ¿Qué me quieres preguntar? –reí-
La vi sonreír y luego reír.
-¿Saliste con Johnny?
Oh, vaya.
-¿Qué? –paré y la miré, sorprendida-
Juro que te mataré, Mark.
-Lo que escuchaste, ¿saliste con Johnny?
-¿Quién te dijo?
-¿O sea que si es real? –Dijo, abriendo su boca por la sorpresa-
-Pues... digamos que sí, pero dime quien te lo dijo.
-Por favor Hara, ¿quién más? Me dijo Mark.
Mark Lee, solo porque te quiero mucho no haré más.
-Le pedí que no dijera nada –suspiré-
-¿Si saliste con Johnny? –dijo casi gritándolo-
-Si Aeri, si salí con él, pero no es necesario gritar –tapé su boca y solo la vi reír-
-Ok, ok, perdóname. Pensé que tus fantasías de salir con él eran solo eso, fantasías.
Yo pensaba lo mismo.
-No es para tanto Aeri, solo... me invitó a comer un helado.
-¿Quién te invitó un helado? –Dijo Sumin, uniéndose a nuestra platica junto con Yuna-
Solo las miré. Esto solo era entre Mark y yo, pero ahora mis otras tres amigas lo quieren saber, y no puedo ocultarlo.
-¿No nos dirás? –Dijo Yuna, jalando de mi brazo-
-Johnny. Johnny me invito a comer helado.
Las dos no dijeron nada, pero por sus expresiones pude descifrar que estaban sorprendidas, y no las culpo, yo estaría igual.
Yuna me miraba muy sorprendida, Sumin igual, pero en su mirada podía sentir que me estaba regañando por hacerlo.
-¿Saliste con Johnny? –dijo Sumin, una vez proceso lo que dije. Solo asentí- ¿Qué tienes en la cabeza, Hara?
Ni yo lo sé, querida Sumin.
-Solo fue una salida, no es para tanto –comencé a caminar, quería evitar las preguntas a toda costa-
-No, no, no, espérate –Sumin tomo de mi brazo, haciéndome parar-
Sumin era muy parecida a mi hermano, siempre protegiéndome y tratando de hacerme pensar coherentemente. Si Doyoung fuera mujer, sin duda seria como Sumin.
Agradezco tus intentos de ayudarme a darme cuenta de que lo que hago está mal, pero ya lo sé, gracias.
-¿Cómo paso eso?
-Pues... estaba en mi casa, platicamos un poco y unos días después, me pregunto si quería salir con él... y ya, eso fue todo.
Mis amigas me conocen tan bien que saben que les miento.
-Si Hara... sabemos que paso más, pero nos lo dirás cuando te sientas lista, no te vamos a presionar –dijo Yuna, evitando que Sumin continuara con su interrogatorio, y se lo agradezco de verdad-
-¿Estas consciente? –pregunto Sumin, haciendo a Yuna suspirar-
-¿De qué me hablas?
-Johnny es mayor que tú, por varios años... esto puede terminar no muy bien Hara...
-Lo sé Sumin, sé muy bien que es mayor que yo, pero decidí salir con él, y no creo que se repita, fue para pasar el rato nada más –asintió, ya sin decir ya mucho-
Espero que volvamos a pasar el rato como hace unos días, espero tus llamadas y mensajes todos los días y a todas horas.
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lovesick | NCT
FanfictionHabía una pregunta en mi cabeza que me mantenía constantemente en el borde "¿qué camino debería elegir?" Estaba bastante perdida con lo que quería, pero una cosa era segura, necesitaba más. Quería intentarlo, así significara salir lastimada. ¿Qué...