lovesick | NCT

12.

Comienzo a creer que soy masoquista o algo por el estilo. Tengo siempre dos opciones, o incluso más, y siempre me inclino por la peor, la que sé que me hará sufrir.

Y lo peor es que comienza a gustarme.

-Ya te lo dije... no es nada, solo... salió, todo está bien –traté de sonreír-

Puse una de mis manos sobre la suya, pero rápidamente la aparto, mirándome más enojado.

-Hara, no trates de engañarme. Sé que me ocultas algo, y creo que se fue lo que paso.

-¿De verdad? –soné sorprendida, más de lo que yo esperaba-

Se perfectamente que hice, y no me engaño, a quien engaño es a él.

-¿Lo dices tú o lo digo yo?

-¿Decir qué? –una risita nerviosa se escapó de mis labios-

-Mierda Hara –regresó sus manos al volante en un rápido y fuerte movimiento-

Su respiración iba haciéndose más agitada y parecía que se había enojado más. Tenía el camino fácil: solo decirle la verdad y ya, y el que sabía en el que iba a sufrir. En esta situación no había más que eso.

-Dime de una maldita vez que mierda hiciste en ese baño, no quiero llegar a más con esto... ni contigo.

Agarraba con fuerza mi mentón, haciendo que lo mirara. La fuerza con la que me tomaba comenzaba a lastimarme y traté de zafarme, pero solo me lastimaba más.

-No hay necesidad de que me hables así... ni de que me tomes así, me lastimas –dije, haciendo que me soltara y me mirara-

-¿Y qué esperas? Dime. Ya. No pienso esperar toda la noche.

-No sé qué parte no me crees o no entiendes, te dije que no fue nada... yo fui al baño y él... Jeno, entró por accidente... y lo besé, estaba algo ebria y no pude controlarlo.

-Yo no pregunté eso, pero gracias por la información –rodo sus ojos. Había una vena bastante saltada en su frente, seguramente se sentía muy frustrado-

-Me pareció mejor idea que estar parada en medio de la sala sin hacer nada...

-Deja de darle vueltas al asunto y dime ya que era lo que me querías reclamar.

-Nada. No es nada –me voltee, dándole un poco la espalda-

Sobé mi brazo. Me sentía nerviosa y ansiosa, este tipo es capaz de cualquier cosa con tal de que le diga la verdad, pero temo que si se la digo, la cosa salga peor.

-Bien, ya que no piensas decirme nada –se acomodó en el asiento del piloto, dando un gran suspiro- te di la oportunidad de que me dijeras que era, y la desaprovechaste... espero que con esto sea la última vez que pase algo así.

Arrancó el carro, bastante rápido que me daba miedo que llegáramos a chocar. Traté de pedirle que se calmara, pero era casi imposible, no me escuchaba. Pensaba en que era lo que haría ahora, lo primero que vino a mi mente fue que me llevaría a casa y que me delataría con mi papá, aunque no le convenía... mi papá se entera de algo de esto y mueve mar y tierra para que se mantenga alejado de mí, aunque, si lo pensaba, no estaría sufriendo... solo sería un muy incómodo momento para todos y prefiero saltarlo.