info: Seis meses después de haber perdido sus recuerdos, Amari se despierta con una sorpresa impactante (más bien, guapo). Descubre quién es y qué quiere.
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"Perdida."
Giro la cabeza buscando la voz, mis movimientos son lentos como si estuviera bajo el agua. Una niebla negra me rodea con destellos de colores y caras que no reconozco flotando en ella. Intento alcanzar la niebla, pero mis brazos se sienten entumecidos y pesados como plomo.
"Muerte" susurra la voz distorsionada.
Miro a mi alrededor rápidamente tratando de caminar a través de la oscuridad en busca de consuelo, pero mis pies están pegados al suelo. De repente, aparece una persona a unos metros frente a mí, un chico, y la esperanza burbujea en mi pecho. Su espalda está hacia mí, pero puedo decir que lleva una capa oscura de algún tipo; con ribetes verdes alrededor de las mangas y el dobladillo.
"¡Ayúdame!" grito, pero sale en un susurro.
Abro la boca para gritar una vez más, pero de repente el suelo se convierte en aceite y comienzo a hundirme lentamente. Intento levantar las piernas, pero cuanto más lucho, más rápido me hundo. Veo cómo el chico comienza a alejarse.
"¡No! ¡Por favor! ¡Sálvame!"
De nuevo, no me oye. Miro hacia abajo y me doy cuenta de que el aceite ha llegado hasta mis hombros.
Esto es todo. Aquí es donde muero.
Sintiendo el líquido subir hasta mi barbilla, inclino la cabeza hacia atrás e inhalo un último suspiro. Cierro los ojos y me preparo para la asfixia.
Una mano de repente agarra mi mandíbula deteniendo el proceso y abro los ojos. Un par de ojos azules brillantes me miran fijamente y puedo sentir en mi corazón que es el hombre misterioso. Incluso si intentara ver el resto de él, mis ojos no me dejarían, como si estuvieran atrapados en los suyos.
"Recuerda" dice con un tono firme. Reconozco su voz, pero no puedo decir de dónde.
Tan rápido como llegó, el chico desaparece de nuevo en la niebla que se cierne y mi descenso continúa. La sensación de espeso aceite cubre mi rostro y mis pulmones comienzan a llenarse del líquido sucio. Todo lo que siento es dolor.
Perdida.
Muerte.
Recuerda.
Recuerda...
Me despierto en el sofá gritando y mi cuerpo entero cubierto de sudor. Jadeando, me siento y coloco una mano sobre mi pecho para tratar de normalizar mi respiración.
