- Un gato choco y empezó a gritar. Paso un gallo y el gato le pidió ayuda a lo que el gallo contesto ¿kiriki que haga?
- Cada día me sorprendes Marcela, tus chistes van en ascendencia.
- ¿Cómo así?
- Cada vez peor.
- ...
Marcela hizo un puchero y Josh soltó una carcajada.
- No te enojes, chiquita.
- La tienes.
- ...
- Tu empezaste... como sea – hace una adema – no puedo creer que la semana se haya ido tan rápido, ¿Qué harás mañana?
- Saldré de fiesta ¿qué harás tú?
- Estaré en mi casa.
Josh, nunca entendía porque Marcela, casi nunca salía a distraerse.
- Deberías salir – sugiere el galán.
- Crees que soy tú – demanda ella – mis únicos amigos son los que conoces, incluyéndote – suspira – ellos tienen cosas que hacer, cómo salir con sus otros amigos o citas.
- Ven conmigo a la fiesta de mañana – propone Josh.
Marcela lo piensa un momento, era clara la respuesta, diría que no, como había dicho, no quería ridiculizar a su amigo; la gente suele ser muy imprudente a veces; no quería hacerle pasar un mal rato a Josh.
- No, pero, gracias, no te voy a arruinar tu noche, tal vez encuentres al amor de tu vida ahí y yo de por medio.
Carajo, esta niña siempre me la pone difícil.
Josh había aceptado sus sentimientos hacia Marcela, sin embargo, era difícil para él, ya que eran amigos y su amistad era genial para arruinarla, pero, más que todo había sido un completo idiota; hablando de su hermana con ella, contándoles sus tontos estereotipos, sin contar que fue una mierdilla al comienzo, por culpa de Luciana. Aun así, estaba dispuesto a hacer un esfuerzo para que ella se interesara en él de alguna forma.
No desista Josh, se dijo así mismo. Ya tienes el plan, hacerla reír, coquetearle y comprarle comida, hasta que se enamore de mí, ella me confesara que le gusto, me haré el sorprendido, le diré que también me gusta, seremos novios, luego... luego... que sigue, ¿engordar juntos y felices por siempre?
Josh sonrió ante la idea.
No se escucha mal.
- Josh – grito Marcela.
Dio un respingo al escucharla, se había sumergido tanto en sus pensamientos que no la estaba escuchando.
- ¿Te pasa algo o qué? ¿por qué sonríes como un idiota? – interroga y lanza una sonrisa pícara – te acordaste de algo, él que se ríe solo, de sus travesuras se acuerda.
ESTÁS LEYENDO
COMO SOY
RomanceMarcela es una chica con muchas inseguridades; muchas de ellas causadas por su dura infacia; ella no se considera un esteriotipo de mujer, pero hasta ahora ha sabido vivir con su fisico sin ningún problema, sin embargo internamente vive una guerra q...