ᴏɴʟʏ ʜᴇʀ | crepusculo

ᴘᴇʀᴅᴏɴᴀʀ ʏ ᴄᴏɴꜰᴇꜱɪÓɴ ᴄᴏɴꜰᴜꜱᴀ

Los vampiros y el licantropo se observaban entre sí, sumidos en un incómodo silencio. Ninguno de ellos parecía dispuesto a romper el hielo, hasta que Edward, decidió intervenir.

— Tenemos que ponernos de acuerdo — dijo Edward, captando la atención de los presentes. — ¿Qué vamos a hacer?.

Jasper, intentando mantener al margen de las emociones de los que estaban ahí, se acercó de a poco quedando un poco mas al frente de todos sin saber que decir realmente.

— Tenemos que hablar con ella obviamente. — Dijo en voz baja, su voz sonaba tranquila con aquel acento sureño que se le marcaba, pero aún así se notaba la preocupación en ella. — Todos nos hemos equivocado y causamos un daño bastante serio... Debemos aceptarlo, lo único que nos queda es intentar acercarnos nuevamente.

Rosalie, quién los observaba a todos con un deje de molestia y seriedad no podía evitar sentirse culpable, entre todos, ella igual se apartó de Lenna. No intento estar con su pequeña y no entendía aquello, la verdad.. si lo entendía, se dejó llevar demasiado por el sentimiento de maternidad con Bella y antes de eso ni siquiera habia pensando en su pequeña, fue una estúpida.

— Debimos estar con ella. — Empezó a murmurar Rosalie, con ciertas duda en su mirada. — Dios, nosotros vimos lo mal que estaba, Lenna estaba destruida. Mi pequeña... Solo la alejamos. — Dijo lo último observando con molestia a los demás pero también, con un dejé de arrepentimiento.

Emmett, guiandose por lo que dijo su pareja también decidió hablar.

— Tienes razón muñeca , pero yo intenté hablar con ella, me disculpé cuando aún estaba en la casa. — dijo Emmett, su profunda voz se escuchaba claramente haciendo que todos los observarán. — Ella solo decidió seguir, ustedes la escucharon esa vez, perdió su confianza.

Jacob se mantuvo en silencio durante todo momento, sabía que la mayor parte de todo era su culpa, por lo menos en la situación de él. Él mismo alejo a Lenna y ahora, ahora no sabía que más hacer.

— No soy nadie para hablar y ustedes mismo lo saben, entre todos nosotros el lazo que más roto está, es el mío. — comentó Jacob, diciendo lo último de manera neutral, aunque sintiendo una especie de molestia en su interior al decir esas palabras. — Miren chupasangres, con todo lo que pasó ya es obvio que nos llevamos mejor, pero ahora apesar de las molestias que aún sentimos, tenemos que seguir conviviendo.

Hubo un corto silencio hasta que Jacob suelta un suspiro y decide seguir hablando.

— Ustedes han sentido esa punzada en el pecho, yo he sentido una molestia en estos últimos días. Una molestia que a veces no me deja respirar, no busco defenderme, se que esto es la causa de algo que yo mismo pedía.... Pero es un dolor que todos seguiremos sintiendo si no hacemos nada. Al fin y al cabo, si el lazo se rompe será un vacío eterno... O en el peor de los casos una muerte segura para alguna de las partes.

Todo quedó en silencio, Rosalie era la que más afectada se veía, sentía aquel pesar y esas palabras la hicieron sentir un terror horrible.

¿Una vida sin su pequeña?

No, se negaba completamente, no.

La imagen de Lenna, mostrando su pecho, aquella marca negra que le rodeaba su corazón, aquellas grietas...

Ellos mismo causaron eso.

Rosalie levanto la mirada, observando a Edward quién solo la miraba de manera triste, le estaba viendo sus pensamientos.

Rosalie no pudo con eso y de cierta manera la rabia le llegó.

— Hablamos de la molestia que nosotros sentimos, ¿Y la molestia que Lenna paso? Nuestro dolor no es nada comparado al de ella. Nosotros solo la tenemos a ella y ella... Nos tiene a todos nosotros, son diversas emociones a la vez, nosotros causamos eso.