Semillas De Emperadores

Encarar el problema

Antes de comenzar con el capítulo, quería dar las gracias por su apoyo, por leer esta historia, por creer que les servirá para distraerse o satisfacer ese "algo" que obtienen cuando la leen...

Gracias a quienes han estado en un inicio, a los que no comentan, que deben tener sus motivos y muchas gracias en serio a quienes si han sido activos en los comentarios, no tienen idea de cuánto adoro cuando lo hacen, por mi les daría gracias siempre, pero tampoco quiero ser tan invasiva por los que ahora les daré gracias de forma general.

Por último y no menos importante he estado haciendo arreglos en algunas partes de la historia, para hacer que se entienda mucho mejor, como también agregar más notas al final de cada cap que he agregado e iré agregando cuando lo crea conveniente y que de seguro quienes han seguido la historia desde el principio y tienen buena memoria notarán más los cambios.

En fin eso era todo...

(Aviso importante al final del cap)

Espero que disfruten la lectura y sin más rodeos comencemos de una vez...

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"¿Por qué?"

El omega se siente abrumado, quiere exigir explicaciones, pero al dar un paso siente como su vista se nubla, Uraume, al percatarse del estado débil, más las fuertes feromonas de tristeza por parte del omega se gana detrás justo a tiempo para sujetarlo.

-¡Yuuji sama!

Ryomen, al presenciar eso le importa poco dejar a los otros alfas de lado. Lo importante ahora era proteger a su omega quien había caído en brazos de Uraume.

-Dámelo.

Pero antes de que quisiera cargar a su amado, detecta el fuerte aroma de los alfas, los cuales a sus espaldas se miraban con intenciones asesinas, esto no hace más que colmar su paciencia, por lo que le indica a Uraume que lo tenga unos momentos más.

-¡¿Qué no ven el estado en el que está mi omega?!¡Vayan a la sala del trono y espérenme ahí!

Los hombres al escucharlo dejan de mirarse y por su lado Ryomen toma en brazos a su Yuuji, por su parte Sukuna no puede evitar desviar la mirada para ver que ocurre a sus espaldas, también estaba preocupado por su omega, pero lamentablemente su hermano tenía razón, debían irse a la sala del trono para atender este tema del cual espera deshacerse pronto.

-Uraume, encárgate de vigilarlos.

Menciona Ryomen ya caminando en dirección al pabellón con su omega, las feromonas de tristeza le hicieron suspirar y liberando sus feromonas espera poder brindar consuelo a su omega herido.

-Si, como ordene.

Pasan los minutos...

Ryomen, besa la mano de su esposa mientras la sujeta con una de sus manos, con otra acaricia su mejilla, para luego seguir con el vientre, en cuanto los demás brazos, estos sujetan la espalda. Lo mira con sumo amor y preocupación, esperando que lo que acaba de ocurrir no le afecte demasiado, menos que esto repercuta en sus hijos, pero es difícil y no le sorprendería si su esposa despierta con odio.