Mala Vida

12

—Los odio

—¿A quienes?

Intente calmar mi llanto —A todos, o a todos los que se llenan la boca hablando mierda de ti, a todos los que te juzgan sin concerte.

—No tienes por qué.

—Pero lo hago, ellos sólo ven a la Luz que quieren ver y no ven a la Luz que yo veo, a la amable, al que pasa su mano por mi cabello mirándome como si fuera una niña pequeña, a la Luz que puede ver con adoración, a la que es capaz de tomar chocolate quemado con tal de no hacer sentir mal a las personas.

—Tus ojos están mal Amity, yo no...

—¡No me importa! — le dije —yo sé que no eres perfecta, que cometes errores como todos, pero es imposible que seas tan mala.

—Me tienes en una estima muy alta y no debes, hazle caso a los demás, aléjate de mi, te haré daño.

—¡No es verdad! — me aferré más a su espalda y Luz se dio la vuelta abrazándome y hundiendo su mandíbula en mi gorro —no me digas lo que tengo que hacer, odio que me digan lo que tengo que hacer, yo quiero estar contigo.

—Solo sufrirás.

—¿Y qué? — le dije hundiendo mi cabeza en su pecho.

—Es que eres tonta— dijo alejándome y tomándome de mi barbilla —mereces algo mucho mejor Amity, tienes un futuro brillante no lo desperdicies estando conmigo.

Me soltó y se alejó dándome la espalda.

El mismo jodido cuento de siempre, ella se iba, se alejaba y yo me quedaba quieta, pero estaba decidida a cambiar eso.

Tomé mi mochila y se la aventé en la cabeza.

—¡Tu eres la tonta Luz!, ¡Idiota! —grite y corrí hasta ella, tome mi mochila, Luz me veía enojada sobándose la nuca —no hay futuro prometedor si no estás conmigo, ya me cansé de siempre verte por detrás, de tratar de llamar tu atención, de ser la primera en dar un paso, no voy a volver a rogar ahora tú irás detrás de mí.

Me alejé refunfuñando y con los puños apretados, cuando doble la esquina sólo corrí y corrí alejándome con las mejillas sonrojadas y una vergüenza invadiendo mi cuerpo por lo que había dicho y esperanza, esperanza en que Luz me buscará por iniciativa propia.