Mala Vida

17

Luz apenas me habló cuando regresamos a clases.

Todo fue besos y abrazos de bienvenida dejando a Luz de lado como si no existiera, ella actuaba de forma que se veía que no le importaba, quise ir a abrazarla, pero me dijo que no lo intentará.

—Dejala Amity es una grosera sin futuro— Skara me jaló a su lado.

—Una folla novias— gruñó Hunter.

—Sigues traumado con eso— Luz le dijo desde su lugar haciendo a Hunter levantarse, pero lo detuve antes que se pusieran a pelear.

—No vales la pena drogadicta de mierda

—Ya bastante Hunter— dije empezando a cabrearme —deja de portarte como un idiota y siéntate, les traje unos presentes, no te daré nada su empiezas a pelear— saqué las bolsitas de chocolate que había preparado para ellos y se las entregué.

—Amity yo también quiero una— Amelia me sorprendió por la espalda y tuve que darle la que era mía porque me costaba decirle que no.

—Yo también quiero— me dijo Matt.

Miré la bolsita que me sobraba pero que era paga Luz —ya no tengo.

—¿Y esa?

La miré de nuevo y puse una sonrisa plana —tienes razón toma.

Se la di y el sonrió, me alegraba por el pero de verdad me hubiera gustado dárselas a lu.

Luz y yo caminamos por el parque de regreso a casa, nos sentamos en los columpios y hablamos de las clases.

—Hunter aún sigue rencoroso contigo— le dije haciéndola gruñir —el de verdad la quería.

—Supongo— dijo sin darle importancia.

_¿De verdad te acostaste con ella? — asintió y no supe que decir —¿por qué la querías?, ¿te gustaba tanto que no te importo que estuviera con otro?

—No me gustaba Amity, fue algo de solo follar y ya.

—¿Por qué?

Luz me miró apretando los dientes e incómoda —A veces las personas tenemos sexo con otra sin necesidad de sentir algo por ellas, solo sexo Amity.

—Yo podría— dije deteniendo el columpio —¿por qué tu si?

—Porque somos diferentes, ya deberías saberlo, porque yo soy yo y tú eres tú y.... de verdad debes dejar de hacer esas preguntas Amity.

—¿Tu me quieres? — pregunté nerviosa — si yo tuviera sexo contigo lo harías porque sientes algo por mi o solo follar.

Ella me miró —tu eres diferente, jamás te faltaría al respeto de esa manera.

—¿De verdad?

—Yo a ti te adoraría, mi prioridad serías tú en todo momento, te trataría como lo más valioso del mundo y... ¿podemos dejar de hablar de esto?

Asentí con las mejillas sonrojadas —esta bien, pero yo quiero que algún día me adores.

Luz gruñó y salto del columpio — joder no me provoques linda.

Me levanté también y le di un beso en los labios.