Capítulo 5

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Después de que Chiara hubiera descubierto aquella rara situación que había vivido Violeta, se reunieron con sus amigos para hablar de todo lo sucedido. Al terminar la conversación no llegaron a encontrar ninguna solución ya que era algo fuera de lo normal, algo que se escapaba de su entendimiento.

Decidieron entonces ayudar a Violeta a adaptarse a este nuevo mundo y en ese proceso de adaptación ir entendiendo cuál fue el motivo de esa transición de época y revertirlo para que volviese junto a su familia.

Chiara y Violeta llevaban ya cerca de una semana viviendo juntas. Para la morena esto no había supuesto un gran cambio en su vida ya que, a pesar de dormir en el sofá para dejar su cama a disposición de la pelirroja, la compañía de esta le agradaba. Violeta, sin embargo, agradecida por el gran gesto que tuvo con ella desde el primer momento, se sentía mal cada vez que la veía acostada en aquel sofá.

Varias discusiones habían tenido a causa de esto, ya que una noche Violeta decidió ocupar aquel sofá sin previo aviso.

Flashback

Después de oír varias quejas de la morena sobre el estado de su espalda, Violeta decidió ocupar el sofá para dormir en él esa noche.

Cogió todo lo necesario y preparó una especie de cama en él. Ya con la camiseta ancha que le había dejado la morena para dormir y un pantalón, se recostó sobre el sofá y movió su cuerpo por este para comprobar su comodidad.

-Es horrible, pobrecita- pensó

Miro la hora en el reloj que había colgado en la cocina y a falta de 10 minutos para que llegara la dueña del piso, cerró sus ojos e intentó hacer que dormía.

Chiara, sin embargo, se encontraba trabajando en la cafetería donde llevaba ya un par de años. Cuando su turno terminó, se dirigió a casa agotada.

Lo que no sabía la morena era lo que se iba a encontrar al llegar a casa. Nada más abrir la puerta su mirada se dirigió al sofá, ya que estaba justo en frente de la puerta. En él se veía un gran bulto arropado con una de sus mantas y una cabellera pelirroja asomando bajo ella.

-No Violeta, sal de ahí ahora mismo- dijo sabiendo el paripé que estaba haciendo la pelirroja

Esta ni se movió.

-Sé que no estás dormida-dijo convencida con sus brazos en jarra

Violeta salió poco a poco de debajo de esa manta con cara de niña buena.

-No vas a dormir aquí, ¿lo sabes, no?- dijo la morena con una sonrisa de lado

-Chiara, por favor, solo esta noche- dijo suplicando

-No

-Pero mírate, ¿has visto tu cara?- le dijo señalándola

-¿Qué pasa, estoy fea?- dijo frunciendo el ceño

-No exactamente- dijo mordiendo el interior de su mejilla escondiendo una sonrisa- estás cansada, tienes mucho trabajo en la cafetería y no duermes bien. Te he escuchado hablando con Bea de tus dolores de espalda- finalizó

-¿Nunca te han dicho que está mal escuchar conversaciones ajenas?- dijo riendo

-No sé de qué me hablas...

-Bueno, aún así, no estoy tan cansada ni me duele tanto la espalda, así que vete a la cama.

-Pues lo siento pero no me pienso mover de aquí-dijo cruzando sus brazos aún tumbada

Chiara, que realmente estaba cansada como para tener esta conversación, llevo una dos de sus dedos en pinza al puente de su nariz. Se quedo así unos segundos para después acercarse a Violeta y cogerla en volandas.

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