Un tiempo con mamá │WonB/Wonha

☀️ 07

Sowon había puesto a trabajar la lavadora, en ningún momento despego a su pequeña bebé de ella, ya había tenido una larga lista de travesuras y el día ni siquiera había terminado.

El sonido de la televisión reproduciendo dibujos animados se escuchaba por toda la sala principal, después de limpiar el desorden de su pequeña hija, Sowon había encendido la TV y había sentado a su ángel a su lado en uno de los sofás limpios, busco dibujos infantiles en su programación, le dio a su bebé el viejo gatito de peluche y ella busco pegamento y pinzas para arreglar el cisne de porcelana que había roto SinB.

Todo parecía en orden hasta que Sowon vio al muñeco de peluche ser arrastrado de las patas con dirección a la cocina.

SinB se había bajado del sofá en la sala y su objetivo era el refrigerador en la cocina.

En el momento en que los ojos de Sowon la captaron, se levantó del suelo y fue en busca de su adorable hija.

Cuando entró a la cocina, no parecía haber nada raro, su bebé ni siquiera estaba ahí, miró alrededor y todo estaba en orden.

¿No se suponía que su angelito había ido a la cocina?

Ella se pasó las manos por el rostro y regreso a la sala, paseando su vista por todo el lugar, no, su hija ya no estaba sobre el sofá. Se encaminó hasta la recamara y aunque estaba cerrada y SinB no alcanzaba el pomo de la puerta, se decidió a entrar.

Busco en el armario, debajo de la cama, en el baño privado que tenía la habitación. Nada, no había rastro de la bebé regordete.

La desesperación de nuevo se estaba apoderando de Sowon, a pasos apresurados camino hasta el baño que estaba en el pasillo y lo reviso, con el miedo recorriendo su sistema, abrió la puerta de la habitación que pertenecía a SinB pero tampoco había nada ahí, la habitación estaba justo como ella la había dejado.

Sintiendo la preocupación a flor de piel volvió a la sala, pero se dirigió a la puerta de entrada y para su desgracia estaba abierta, su corazón se aceleró y de inmediato abrió la puerta para salir al pasillo de su departamento, giro la cabeza viendo a ambos lados, con la esperanza de captar alguna señal de su bebé, pero no obtuvo éxito alguno.

Estaba por salir del departamento, cuando un par de manitas adorables se colocaron sobre sus piernas y una SinB llena de curiosidad asomó su cabecita entre las piernas de Sowon.

La mirada de la castaña mayor inmediatamente bajo hasta ver a su hija cruzar entre sus piernas y salir al pasillo, Sowon suspiro llevándose una mano al pecho y enfoco la vista sobre SinB, pero de nuevo sintió que el aire se iba de sus pulmones al ver el estado en el que se encontraba su bebé: Mojada desde la cabeza hasta los pies de lo que parecía ser leche, con las mejillas llenas de papilla sabor manzana, y las manitas con migajas de pastel, sin contar que su pequeña nariz de botón tenía rastros de crema dulce.

Algo no cuadraba.

Tomó en brazos a su ángel y cerró la puerta con llave, camino con ella hasta la cocina y lo que encontró le hizo querer llorar. La puerta del refrigerador estaba totalmente abierta, las papillas de manzana regadas y con rastros de haber sido mordisqueadas, la leche que anteriormente había abierto estaba regada sobre la comida y el suelo de la cocina, el pequeño pedazo de pastel que habían comprado ya ni incluso tenía forma de pastel, más bien, se parecía a una masa de chocolate; el frasco de mermelada estaba en el suelo con la tapa abierta y por supuesto el señor gatito empapado de leche y chocolate, estaba guardado en el empaque de las fresas.

Sólo había una explicación para semejante ataque y esa era la bebé SinB.

La bebita se había metido al refrigerador, había abierto y mordido todo lo que estuvo a su alcance y destrozado otra parte.

Sowon miró fijamente a su hija que estaba en sus brazos, y la pequeña nena regordeta le sonrió y dejó un sonoro besito en la mejilla de su mamá, manchándola con restos de pastel en el proceso, para después esconder su carita en el cuello de su frustrada madre.

—SinB, SinBita, hija mía. ¿Qué voy a hacer contigo?

Y de nuevo, Sowon tendría más trabajo del queimaginó.