CAPITULO 29: ADIOS

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LISA

-LILIIIIIIIIIIIIIIIIII!

El grito de Ella nos desconcertó a todos ni siquiera sabía de donde venía aquel grito, hasta que vi a la pequeña Ella correr hasta nosotros atravesando entre la multitud de gente. Ella sonrió y abrazo a Lili , después me abrazo a mi.

-¿Pequeña que haces aquí? ¿Con quien vienes? —fue lo primer que se me ocurrió preguntar.

Tal vez venía con el Sr Kim y la tía Iréne.

-Por allá — Ella apuntó al otro lado del estanque.

A pesar de la distancia los ojos de Jennie y los míos se encontraron. No dio ni un solo paso solo se quedó parada justo a lado del el... El hombre del restaurante.

-Lisa ... si tú quieres ir y hablar con Jennie nosotros podemos cuidar a las niñas— Bam Bam habló con todo el tacto del mundo como si temiese que yo fuera a explotar o derrumbarme en aquel lugar.

Pero negué rápidamente.

-Quiero irme de aquí ahora—fue lo único que pude pronunciar.

-De acuerdo llevaré a Ella de regreso con su mamá vamos niñas despídanse —Bam Bam seguía tomando el control de todo — ustedes adelántense.

-Adios pequeña Ella —me despedí de Ella.

-Adiós Lisa —agitó su manita con una gran sonrisa.

Las niñas no tenían la culpa y no era necesario meterlas en un drama de adultos.

En este punto ni siquiera sabia quien tenía la culpa.

Bam Bam tomó de la mano a Ella y la llevo de regreso con Jennie.

Christopher , Lili y yo nos adelantamos al estacionamiento.

Lili estaba triste porque no había podido ver a los leones.

Christopher respiraba agitado y sus fosas nasales estaban más abiertas de lo normal. Estaba furioso ... incluso más que yo.

Yo no estaba furiosa.

Yo estaba herida.









...

JENNIE

Comencé a transpirar , mi corazón latía mil veces por segundo.

¿Por qué?

¿Por qué?

Porqué había pensando que ocultar a Jong-in por un tiempo sería una buena idea?

¿Por qué lo había echo en primer lugar?

-¿Jennie estas bien? —preguntó Kai preocupado — ¿Quienes eran ellos?

-Nadie —respondí sintiéndome cada vez más débil.

No tenia ganas de darle explicaciones a Kai.

No ahora.

-De acuerdo pero tienes que tranquilizarte —Jong-in tomo mis manos y me ayudo a concentrarme en el presente— Inhala .... Exhala... Inhala... Exhala.

Repetimos las respiraciones por un par de minutos y mis latidos poco a poco se fueron regulando.

-¿Mami estás bien? — Ella hizo un puchero anunciando las lágrimas.

TOGETHER|JENLISA G!P |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora