"Cuando amo a alguien intensamente, no digo a nadie su nombre. Es casi una traición. He aprendido a amar el secreto" - El retrato de Dorian Gray (Oscar Wilde).
Lo ve a lo lejos, y al igual que ayer, sus ojos no pueden dejar de observarlo, de grabar cada expresión que hace, por pequeña que sea. Ha sido parte de su vida desde que tiene consciencia, sus primeros momentos siempre han estado enraizados a él, hasta los más depresivos. Izuku cree que me sigue atando al anhelo de tener lo que Kacchan tiene con Kirishima, de hablar naturalmente, sin trabas, de lo que sea, de poder sacarle sonrisas que se muestran como muecas, de producir en su voz lo más cercano a una risa que intenta disimular. Lo ve y envidia a quien ve él.
Sabe que con la historia que tienen, debería estar más que satisfecho con que sean ahora una especie de "amigos", que se ayudan con las materias, que hablan de vez en cuando, pero no solo quiere eso, desea que se sienta cómodo con él, que disfrute de su compañía así como lo hace con Kirishima. Lo que ve en él es una familiaridad e intimidad que no comparte con Izuku, ese lenguaje íntimo que se genera con el tiempo, con la interacción y conocimiento de la otra persona.
Con Kacchan siempre ha sido todo muy complicado. Él lo hace complicado. Piensa Izuku. Cree que aún conserva pensamientos de esos años donde lo odiaba y quería que desapareciera, piensa que lo que le ató a él en esos momentos fue saber que podía ser diferente, que si esperaba que se le pasara el enojo con él, volvería a ser el Kacchan del que tanto aprendió y adoró como un ídolo. Que abrupto fue su cambio, de pasar a caminar a su lado, con los mismos sueños y anhelos, a quedar en el suelo, con él mirándolo desde arriba con desprecio por lo que era; alguien diferente a él. Izuku piensa que eso lo marcó, su mirada fue la que cambió su vida hasta el día de hoy, que si bien ya no es la misma, nunca volvió a tener esa ilusión de la primera infancia, esa inocencia de creer que todo es posible, que había un futuro juntos, uno al lado del otro.
Bakugo lo mira en su dirección, y su mundo se paraliza, ya no hay pensamientos del pasado ni autodesprecio, solo es él, con sus bellos ojos mirándolo, volviéndolo real, haciendo que aterrice en el presente donde es alguien importante para que lo mire. Rompe el contacto visual, mira a Kirishima, le dice algo y se acerca caminando hacía Izuku. Contiene la respiración por costumbre, siente como aprieta sus manos a los costados con cada paso que da hacía él.
Sí, definitivamente cambió, no ve odio en su mirada ni un atisbo de desprecio, lo mira con lo que cree es curiosidad. Le pregunta si pasa algo, e Izuku solo puedo pensar que le pasa de todo si se trata de él, que le desea y que está harto de esa distancia. Se pregunta si todo sería más fácil si no se hubieran reconciliado, estaría lidiando con su enojo y desprecio, no se le pasaría por la cabeza nada más que admirarle desde lejos, desde la precaución de sus pasos, de no ser un obstáculo en su vida, pero de permanecer lo suficientemente cerca para presenciar sus cambios, como un planeta orbitando al sol.
Lo mira con preocupación y no puede más que pensar en que está agradecido de este momento, incluso con todo el malestar que suele pasar, se compensan en esos instantes donde se siente importante para él, los esperaría siempre. Podría mantenerse en abstinencia todo el tiempo que sea necesario hasta que se apiade de él sin saber el tormento que pasa esperando por su atención. Pero sabes Kacchan, piensa Izuku, cada cosa que me entregas, por pequeña que sea, me inunda el pecho hasta no sentir nada más que felicidad de que me veas, soy tuyo Kacchan, aunque no lo sepas.
Luego de disuadir las preocupaciones de Katsuki, hablaron de estudiar juntos para las últimas pruebas del semestre. Eso es algo que no se hubiera imaginado posible hace unos años, pero ya están por terminar su época escolar; son otros, ya no queda nada de aquellos adolescentes que no sabían lo que querían y quiénes eran. Bueno... Katsuki siempre ha sabido quién era. Reflexiona Izuku, era él el que no formaba su identidad. Han cambiado tanto, y dentro de todos estos años, se han vuelto a conectar, formaron una amistad nuevamente. Izuku piensa que es quien es porque lo conoció, incluso antes de saber quién era, solo tenía la seguridad de que lo quería descubrir a su lado. Kacchan siempre ha sido su certeza.
Se pregunta si le resultan incómodas las conversaciones que tiene con él. Izuku da todo de sí para no ser demasiado denso, y en no intentar serlo, lo termina haciendo. Lo que pasa es que su cabeza va a mil por hora, no puede evitarlo, quiere hacer que se quede hablando con él y en el proceso, analiza todas las opciones de respuesta que se le ocurren, Katsuki se estresa y le suelta un "deja de murmurar, nerd, no te entiendo". Se disculpa e intenta volver a una conversación normal. Pero ¿qué es normal?, si nada de lo hemos tenidos entre los dos ha sido normal. Piensa Izuku en sus adentros; ¿Será que le doy vueltas a todo y lo termino complicando?. Quizás todo sería más fácil si fuera un poco más como Kirishima, con ese humor natural y su capacidad de fluir con la vida, quizás por eso te hiciste su amigo inmediatamente, si fuera más como él, todo sería más fácil, pero ya no sería yo...y no podría amar ese lado de mí que te ama, ese lado desde el cual he crecido tanto y que me hace ser lo que soy actualmente. Izuku puede soportar ese amor no correspondido, solo hay días donde pesa un poco más y se le hace insoportable.
Cada que hablan, surge en Izuku una necesidad de poder retenerle un segundo más, de querer controlarlo todo para ser perfecto ante él, pero se vuelve todo lo contrario. Solo quedan miradas al piso, sonrisas nerviosas y una necesidad de querer corregir lo que sea en que me haya equivocado, si con eso puede retenerte un segundo más y estirar todo lo que pueda ese instante, donde conectan miradas, respiran cerca y puede oler tu esencia a café y dentífrico, se le hace inevitable pensar que ahora sí las cosas serán como lo eran cuando eran niños, donde jugaban juntos, y disfrutaban de su presencia. ¿Es posible volver a esos años? con la historia que tenemos, con los traumas que tenemos. Piensa Izuku.
Izuku no sabe en qué momento se dio cuenta de que lo amaba como un amante, no fue un despertar consciente de lo que sentía por él, sino más bien, una idea que fue echando raíces en su cabeza y que cuando se percató de que estaba, ya habían pasado milenios desde su crecimiento, lo sentía natural, como si siempre le hubiera deseado y le hubiera mirado con ese brillo de atracción. Siempre han sido así las cosas él, son tan implícitas que por más que intente controlar y anticipar lo que pueda generar en él, ya es demasiado tarde, ya se siente suyo de pies a cabeza. Creo que en el fondo siempre te he pertenecido, te sale natural el despertar ese lado en mí, ese donde la devoción y admiración se entremezclan con deseo y amor. Piensa en conclusión de sus divagaciones. Se pregunta cuánto tiempo más tendrá que censurar estas emociones que hacen estragos en su corazón con cada palabra o acto suyo. ¿Será que algún día te des cuenta de lo que siento?, espero que no. Afirma Izuku mirando la espalda alejarse de Kacchan.
- - - -
Bueno, este es el primer capítulo, espero no sea muy confuso entender cuando son pensamientos y diálogos, serán capítulos de este estilo, más introspectivos que descriptivos, serán cortitos :c no se como le hacen para escribir tanto krbgkfdnf espero les guste la historia.
Hace años que quería escribir un fanfic de ellos, cumpliendo metas <3
Cualquier retroalimentación es bienvenida uwu
Nos vemos para el próximo capítulo < 3
ESTÁS LEYENDO
Belleza // Bakudeku
FanfictionIzuku Midoriya y Katsuki Bakugo llevan toda su vida teniendo dificultades para mantener una relación sana. Con un historial de bullying y varios problemas de comunicación, es que estos amigos se embarcan en un viaje de autodescubrimiento intentado r...