Urano como ya era costumbre, yacía escribiendo una vez más en su diario, narrando la graciosa pero preocupante escena que había montado junto con Neptuno hace unos días.
En su rostro, se podía apreciar la sonrisa boba que provocaba pensar en su compañero. En su núcleo yacía aquel sentir que causaba reacciones en él como un sonrojo extremo, temblores leves, mariposas en el vientre y de la gran sensación que su cuerpo experimentaba, su cuerpo se derretía poco a poco.
Aquel 'malestar ', como él le decía, lo había visto presente en los gigantes gaseosos al comienzo de su relación amorosa. Obviamente no era un tonto, sabía lo que estaba empezando a experimentar en su interior, aunque negara el sentimiento, seguía estando allí sin desvanecerse.
Recordaba cómo Saturno pasaba días enteros en su órbita, contándole cada cosa, cada sentimiento, sueño, pesadilla, temor o miedo que se cruzara por su cabeza. Le hartaba, pero Saturno era una de sus mejores compañías desde siempre.
¿Será que se trataba de esa misma emoción llamada "amor"?
Para salirse de dudas, llamó específicamente al planeta más grande mediante cartas a su órbita, quería estar seguro de lo que sentía y que esto no fuera producto solamente de su imaginación.
"Debo estar tranquilo... Cuando llegue Júpiter todo esto se resolverá y podré saber si esto es solo pasajero..." Se decía Urano a sí mismo, tratando de calmar sus nervios.
El más grande tardó bastante en llegar a su órbita, y Júpiter solamente se excusó con la idea de que había estado leyendo un libro y no quería dejar a medias final de éste mismo, pues según él estaba a punto de acabarlo (lo cual para Urano era otra más de la tontas excusas baratas de cualquiera de los dos gigantes gaseosos, sabía que había estado besuqueándose con Saturno por allí).
"Como sea, grandote. Este tema es muy importante para mí y quiero que me escuches atentamente, ¿entendido?" Explicó el planeta celeste, expresando con sus manos la 'seriedad' de todo el asunto.
"Está bien, Urano. ¿Cuál es todo este asunto que te está perturbando? Soy todo oídos..." Se sienta tranquilamente sobre un asteroide y pone su completa atención en Urano.
Urano comenzó su explicación, sincerándose completamente con Júpiter, sin saltarse ningún detalle. Dió inicio a todo su discurso empezando por cómo se sentía cuando se trataba de Neptuno, cada 'malestar ' que su cuerpo experimentaba. Las constanes reuniones que ambos planeaban y la experiencia que vivían en cada una de ellas, tampoco las descartaba.
Escuchó atentamente y sin hacer ningún comentario acerca de su discurso, solamente tomaba nota mental de cada detalle que Urano le relataba y llegó a una sola conclusión.
"Sé que es lo que tienes Urano, y es algo que creo que tú has estado ignorando por bastante tiempo, por la pena y vergüenza que sientes respecto a este tema..." Habló seriamente, interrumpiendo una anécdota del más bajo que ya no tenía nada que ver con el tema.
Urano calló inmediatamente en cuanto Júpiter pronunció las siguientes palabras, antes de siquiera formular cualquier oración.
"Estás enamorado de Neptuno, amigo mío" Terminó de decir el más alto.
Y con ello, un gran torbellino de emociones invadió el pobre corazón del planeta celeste, muchas de ellas felices, otras tristes o frustantes. Todo un revoltijo de sentimientos encontrados en su interior.
No quería amar...
No podía permitirse de nuevo a hacerlo...
No quería perder de nuevo y quedar como un patán...
Por frustación y para aliviar un poco su gran remolino emocional, Urano comenzó a llorar, teniendo sus mejillas teñidas bajo el gran sonrojo que cubría todo su rostro. Se maldijo a sí mismo por no poder elegir de quién enamorarse y hacer caso a su tonto núcleo.
"Maldito... Maldito seas, tonto, tonto corazón... ¿Por qué de mi mejor amigo?..." Pensó en sus adentros, sintiendo una gran sensación de calidez en su pecho, pero frustración de haberse vuelto a enamorar.
Y Júpiter solo esbozó una linda y grata sonrisa, pues por fin había dejado de ignorar a su núcleo y había entendido de quien estaba enamorado, ahora podía detenerse a afrontar sus propios sentimientos.
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Hola!! Espero se encuentren bien.
Parece que nuestros pequeños planetas por fin se van dando cuenta de lo que en verdad sienten por el otro.
No culpen a Uranito, solo tiene miedo e inseguridad por volver a amar de nuevo. Su primer amor fue Saturno, pero no era correspondido (eso solo traumó al pobre), creo que con eso se dan una idea.
Bye estrellitas!!
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Lonely
Fanfic"La soledad es algo que nos destruyó y nos acorraló durante gran parte de nuestra existencia, pero a tu lado he conocido lo que es verdaderamente un amigo y compañero. En todo momento, siempre estuviste a mi lado, y ahora puedo decir que soy feliz...