Capítulo 3 | Negación

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A casi una semana de la partida de la reina, y con la herida aún abierta, haciendose cada vez más profunda, la etapa de negación continuaba para muchos de los seres queridos de Mal.

Bella y Adam se habian ocupado de los preparativos para el funeral ya que Maléfica y Hades se encontraban totalmente destrozados como para realizarlo ellos.

Hadie volvió a casa con sus padres, en estos momentos todos necesitaban de todos para superar la situación que estaban viviendo, la pérdida de la pequeña de la casa, no fue fácil. Y no lo sería nunca.

Hadie llegó sin hacer ni un solo ruido a la casa, la casa casi siempre estaba en total silencio desde el funeral de Mal, y por casi siempre me refiero a que en algún momento del día se escuchaba el llanto de alguno de los tres habitantes.
Se dirigió hacia su habitación pero se detuvo en seco al escuchar la conversación de sus padres.

Hades, fue quien se había tratado de mantener sereno durante toda esa semana, ya que no quería que su familia lo viera sufrir, él era quien siempre estaba para consolarlos cuando algo salía mal.

—Esto no se va a quedar así...—Hablo Hades mientras estaba sentado en el sillón, sin quitar la vista de las fotos de su hija que estaban colgadas en la pared.

—¿A que te refieres...?—Preguntó Maléfica sentada a su lado, poco a poco ella aprendió a controlarse aunque aún tenía sus puntos de quiebre al recordar a su hija, o al encontrar algo que le perteneció, fue por eso que tuvieron que quitar la mayor parte de las cosas que le pertenecieron a Mal.

—Voy a encontrar a quien mato a mi hija...—Comenzó a decir Hades, seguido de eso hizo una pequeña pausa—. Y me encargaré de que sufra. Va a sufrir todo lo que hizo sufrir a mi niña al quitarle la vida...

Maléfica guardo silencio unos momentos para luego poner su mano sobre la de su pareja.

—Vamos a averiguar que fue lo que pasó...—Contestó Maléfica —. Te lo juró...

Hades suspiró y asintió levemente para dejar de ver a su pareja y finalmente ver de nuevo las fotos de su hija. Actualmente se arrepentian de no haber valorado la niñez de Mal y no haberle tomado más fotografías. O no haber guardado todos los pocos juguetes que tuvo Mal. Hadie se limitó a no decir más y se fue a su habitación, él también había tomado una decisión respecto al asesinato de su hermana. Él también iba a tomar venganza por ella.

Por otra parte, en el castillo Beast, el rey seguía muy afectado por la muerte de su esposa, antes era un hombre feliz y lleno de vida. Ahora solo parecía un fantasma, caminaba totalmente callado por los pasillos, y ya no sonreía. E incluso, trato de olvidarse del dolor de haber perdido a su esposa de alguna manera y comenzó a beber.

Bella y Adam subieron a buscar a su hijo y suspiraron al ver el almacén donde guardaban las bebidas abierto (Wisky, Ron, Vino, etc). Inmediatamente se dieron cuenta de que Ben estaba bebiendo de nuevo. Adam fue el primero en abrir la puerta y asomarse, en caso de que Ben estuviera algo agresivo. Para su suerte, el chico estaba sentado en el suelo, 4 botellas de licor estaban vacías a su alrededor y en su mano sostenía otra que estaba a la mitad.

—Ya has bebido suficiente, ¿No crees?—Preguntó Adam acercándose a su hijo para tratar de quitarle la botella de una forma cautelosa para que no se pusiera agresivo

—Nunca es suficiente—Respondió Ben totalmente ebrio y confundiendo algunas palabras

—¿Casi 5 botellas completas de licor no te parece suficiente?—Preguntó Bella entrando en la habitación y sintiéndose impotente de no poder hacer algo al respecto.

—No es suficiente porque sigo recordándola... quiero olvidarme de este dolor, del recuerdo de haberla visto como la alejaban de mi y no poder hacer nada...—Contestó Ben mientras sus ojos se llenaban de lagrimas y arrastraba a la vez un poco las palabras debido a su ebriedad.

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