-Día 9-

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Hoseok regresaba a paso lento por las vías con la mente un poco distraída, al llegar a su casa, dejó sus cosas y se acostó en el suelo frío, recordando su pasado y la vida que tenía con aquellos que le habían dado una familia

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Hoseok regresaba a paso lento por las vías con la mente un poco distraída, al llegar a su casa, dejó sus cosas y se acostó en el suelo frío, recordando su pasado y la vida que tenía con aquellos que le habían dado una familia.

Pequeñas lágrimas escaparon de sus ojos, su pecho dolía mucho a tal punto que no pudo seguir respirando con normalidad, pero todo ese estrés acumulado se vio interrumpido por una pequeña bolita de pelos.

El mayor brincó asustado por el animal que tenía en su pecho, enseguida dejó el miedo, pues el pequeño ratón no se apartaba de él.

—¿Un ratón blanco?_De inmediato la imagen del dueño paro en su mente.—Eres Jaq, la mascota del joven Yugyeom.

Las manos del mayor toman al pequeño animal, lo sostiene sin temor alguno y lo acerca a su rostro para ver sus ojos rojizos, pero no los nota, como siempre. Desde aquél incidente, no ha podido ver el color rojo, cada elemento o comida que tenga dicho color lo ve gris.

Hoseok sabe disimular muy bien sus miedos y confronta todo aquello que le hace daño, distingue el rojo entre muchos, pues al ser un color llamativo sus ojos lo notan opaco y distante, tal cual como el joven Hyunjin con su color distintivo en su cabello.

—Debes tener hambre._Le habló al pequeño roedor.—Creo que es hora de dejar la tristeza y comer algo para estar bien mañana, ¿Te parece?

Los bigotes de Jaq se movían de manera discontinua como si le afirmara.

-9-

La pequeña mota de pelos descansaba en los bolsillos delanteros del abrigo del profesor Jung, este salía de su auto y se dirigía a las puertas principales del Instituto.

—Hermano, deja el estrés._Se quejó Jackson cubriendo sus oídos.

—¡Es que no entiendes?, ¡mi amigo está perdido!_ Yugyeom sostuvo la camiseta de su amigo con fuerza.—Si me entero que fue alguno de esos idiotas, me las pagarán.

Los dos chicos de Got-Four seguían su curso hacia la entrada pero algo llamó la atención de todos, en especial del moreno peli blanco de los chicos antibalas, pues este se había convertido en el centro de atención juntos con dos personas más.

Namjoon con los ojos bien abiertos, estaba más que sorprendido como los demás, pues su querido tío político, Kim Jong-in o conocido como "Kai", estaba besando a su profesor de artes.

Fueron unos segundos, pero fueron suficientes para llamar la atención del cuerpo estudiantil, claramente no habría problemas por ello, más que chismes irracionales.

—¡Kai!_ Gritó Hoseok con la mejillas sonrojadas, su cabello estaba desordenado por el moreno de dicho nombre.—Que te dije sobre saludar de esa forma._Dijo agitado.

—Perdoname la vida, pequeño Jay, es que no resistí ante tal hermosura._Guiñó un ojo de forma coqueta.—Te extrañé._Dijo con voz melosa.

Hoseok bajó el rostro avergonzado, tomó del brazo a Kai y lo llevó hacia el estacionamiento de los profesores.

Un lienzo en blanco-[Allxhoseok]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora