Invierno 'Kagehina'

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1 año y 10 meses, ya quedaba muy poco para volver y verme nuevamente con mis queridos y preciado amigos, realmente me emocionaba eso. Sobre todo porque volvería a ver a aquella persona por la que mi corazón latía, si, Kageyama. Al fin lo volvería ver, lo primero que haría al volver sería correr hacia él y darle un gran abrazo, besarle y acariciarlo, lograríamos superar dos años de relación a distancia y nos haríamos más fuertes como pareja, esto me empezaba a emocionar.

( 𝖨𐓣𝗏ꪱᜒ౿𝗋𐓣𝗈 'ƙɑ𝗀౿𝗁ꪱᜒ𐓣ɑ' )

Con tan solo dos meses antes de volver, Oikawa y yo estábamos ocupados haciendo reservaciones y demás, planeabamos una gran despedida ¡A lo grande! Partiriamos a cumplir nuestras metas con todo lo que habíamos aprendido en Brasil, estaba muy emocionado.
—Bien, Shoyo. Tengamos un partido dos contra dos.
—Nos hacen falta dos personas más, ¿no crees?
—Si... entonces uno contra uno.
—Por mi esta bien.
Jugamos hasta las 15:00, después ordenamos e hicimos de comer, se sentía raro saber que en un par de meses esta ya no sería nuestra rutina. Comimos en paz, todo se sentía anormal desde que planeabamos nuestra despedida.
—Eu, Shoyo—.Alcé la cabeza en forma de decir que le prestaba atención.—¿Qué se siente estar a nada de volver?
—Son dos meses que espero no pasen rápido.—mire el calendario pegado en la pared de Oikawa, le eche un vistazo a toda la casa de Oikawa de rápido, buscaba una forma de responder sin volverlo algo sentimental.—Extrañare estás viejas paredes.
—De viejas no tienen nada, grosero.-el asintió, confirmando que entendía a lo que me referia—Yo también extrañare estas columnas y este olor a verano infinito.
—¡Basta de lamentos! Disfrutemos el ahora y cuando volvamos tendremos historias que contar a nuestra familia y amigos.
—Pues tú más que historia tendrás una novela, eh—el bromeo debido a todos los acontecimientos que pasaron con Kageyama Desde mi llegada a Brasil, solo rodé los ojos en un gesto algo parecido a decirle "cállate, no es chistoso". Sólo rió.—¿Qué haras cuando lo veas después de tanto?
—Lo abrazare, supongo.
—Si yo fuera tú, le daría una cachetada que se le quedara marcada para toda su vida, pero bueno.
—Si tengo ganas de hacerlo...
—¿Y por qué no?
—¿No crees que estaría mal? Digo, regresar después de dos años y lo primero que haría sería cachetearlo, no lo se...
—Estaría bien, lo golpeas por idiota y luego lo besas porque lo extrañarte, se vería como una de esas comedias románticas que tanto te gusta ver.
—Sería divertido—nos reímos, imagino que cada uno imagino ese escenario de manera distinta.
—Shoyo, tu teléfono esta sonando.
—Oh—me levante de la mesa y atendí, era Suga.

¡Suga, que sorpresa!

¡Shoyo!

Su voz al otro lado del telefono sonaba agitada, conmocionada y preocupada.

¿Todo bien, Suga?

Shoyo, Kageyama acaba de tener un accidente de tráfico.

¿Qué? ¡¿Cómo?!

No lo sé, me acaban de notificar, estoy en camino al hospital en el que esta.

¡¿En que ruta fue?!

¡En la ruta que da hacia la playa!

¿Entonces lo atendieron rápido?

Por lo que entendí, si. Yo ya voy en camino hacia allá, cualquier cosa te aviso.

Si, por favor...