Capítulo 6

1K 51 23
                                    

Me miró, notando la preocupación en mis ojos. Mi corazón latía con fuerza.

— Lo siento, yo... — dije — No le puedo hacer esto a tu hermana, la quiero mucho y no sé que pensaría si se enterase de que he besado a su hermano mayor

Él pasó una de sus manos por su cara y no obtuve respuesta de su parte.

— Héctor — comencé con la voz temblorosa — Te quiero pero esto no debería haber pasado

Héctor me miró, acariciando suavemente mi mejilla.

— Amelia, no puedo evitar lo que siento por ti. Te amo desde hace tiempo — se sinceró —

Bajé la mirada, una lágrima solitaria rodando por mi mejilla.

— Yo también te amo, Héctor. Pero sabes que esto complicará todo. Lucía es mi mejor amiga, y no quiero que nuestra amistad cambie por mi culpa. No quiero perderla a ella, ni a ti.

Héctor suspiró, entendiendo el dilema.

— Amelia, no quiero que te sientas atrapada entre nosotros dos. Si debemos olvidar esto para proteger tu amistad con mi hermana, lo haremos. Pero quiero que sepas que mis sentimientos por ti no cambiarán.

Asentí lentamente, aunque mi corazón se rompía al decir las siguientes palabras.

— Intentemos ser amigos, como antes. Prometamos que no dejará de ser así

Héctor asintió y se acercó para abrazarme con fuerza por última vez.

— Prometido. Seremos amigos, como antes

Nos separamos y él volvió con sus amigos mientras que yo me quedé en el baño, llorando.

Amaba a Héctor, claro que lo hacía y daría lo que fuese por que nuestro amor vaya más allá de la amistad pero no sabía como Lucía se podría llegar a tomar esto y no me quería arriesgar, una vez prometí poner a mis amigas delante de chicos y así lo iba a hacer el resto de mi vida.

Estaba sentada en la taza del váter con la puerta cerrada hasta que alguien la golpeó.

— Amelia, ¿estás bien? — preguntaron —

Era Raquel. Raquel es como un ángel caído del cielo, cuando más la necesitaba siempre aparecía.

— Héctor se ha marchado — dijo — Por lo visto no se encontraba bien

Abrí la puerta y cuando me vio llorando se abalanzó hacia mi.

— ¿Qué ha pasado..? — preguntó — No llores Amelia...

— Que Héctor y yo nos hemos besado y al separarnos le he dicho que él y yo no podíamos tener nada porque me daba pánico pensar como se lo podía tomar Lucía todo esto

Raquel se quedó con la boca abierta y yo continúe hablando.

— Él simplemente me ha confesado que estaba enamorado de mi y ha entendido la situación, pero yo también lo amo Raquel — expliqué rompiéndome en llanto —

— Amelia, quiero que sepas algo muy importante — dijo Raquel tomando mis manos entre las suyas — Sé que esto no es nada fácil de afrontar y que todo parece complicado, pero todo va a salir bien. Eres una persona increíble y mereces ser feliz, estoy segura de que Héctor te hará la persona más feliz porque cuando estás a su lado sé que ya lo eres y que él también lo es contigo

Levanté la vista, con mis ojos llenos de incertidumbre. Raquel sonrió con calidez y continuó:

— Si Héctor realmente te ama, esperará por ti. El verdadero amor no se apresura, no presiona y no se desvanece con el tiempo. Él entenderá lo importante que es vuestra amistad y respetará lo que estás sintiendo

𝙵𝙾𝚁𝙴𝚅𝙴𝚁 𝚈𝙾𝚄𝙽𝙶 || 𝐇𝐞́𝐜𝐭𝐨𝐫 𝐅𝐨𝐫𝐭 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora