Mi Nueva Realidad | Danganronpa 2

016.┊Sueños

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Caminaba junto a Nanami, ella se ofreció a dejarme en mi cabaña. En el camino ninguna hablo, ambas estabamos concentradas en nuestros pensamientos y comiendonos la cabeza para saber quien será el proximo muerto y quien será el próximo asesino.

— Nos vemos, Nanami. — Me despedí de ella con intenciones de entrar a mi cabaña.

— Si necesitas algo, no dudes en hablarme.

Vi como caminaba por el puente y se dirigía a su cabaña, entrando en ella.
Imite su acción, entrando en la mía.

Estaba oscuro, solo se veia la ligera luz de la luna haciendo sombra sobre los muebles.

Una sensación de soledad que al mismo tiempo era agradable inundaba mi corazón, una sensación agradable sin querer que se fuera.

Pero solo fue temporal.

— ¡Noozoomii! — Ibuki entro a mi cabaña gritando a todo volumen.

— ¡Ibuki! ¡Baja el volumen!

— ¡Perdón! ¡Perdón! — Se disculpa moviendo las manos. — ¿Por qué est tan oscuro aquí? Animate un poco Nozomi. — Con un movimiento de su dedo encendió la luz. — Ahora sí.

Cerré mis ojos intentando acostumbrarme al cambio de liz tan repentino.

— ¿Cómo entraste? Juro que cerre con llave la puerta. — Le pregunté abriendo un poco mis ojos.

— Sobre eso... olvídate de tu llave, no la necesitaras por un tiempo.

— Ibuki... ¿Rompiste mi cerradura?

— No solo eso. — Dijo con una sonrisa traviesa. — Oye que linda tu cabaña, me encanta el diseño de... y el de...

Mire hacia la puerta mientras ella intentaba cambiar el tema. Tenía un hueco, uno grande.

— Ibuki, ¿por qué hay un hoyo en mi puerta?

— Ibuki penso que las puertas tenian candado por dentro, luego se dio cuenta que no.

— ¿Qué es lo que quieres? — Le pregunté terminando el tema.

— ¡Ibuki dará un concierto! — Saco una especie de folleto promocional. — A ibuki le daría mucha ilusión si vas. — Dijo con un poco de vergüenza.

— Claro que ire, estaré allí.

— Gracias...

Ibuki parecia apenada, en el fondo sus accion eran para calmar la situación actual.

— Me tengo que ir, Ibuki tiene que repartir más folleto.

— Esta bien, nos vemos mañana en la noche.

Ibuki se retiro, dejando nuevamente el lugar en silencio.

— Gracias, Ibuki. — Susurré para mi misma.

— Dingo, dong, dong, ding. — Le tele se encendio, mostrando a Monokuma. — Son las 10 p.m en punto, es hora de ir a dormir. — Dijo con su voz chillona de siempre.

Me puse piyama y me dispuse a acostarme, pero un sonido llamo mi atención.

— ¿Nozomi? Necesito hablar contigo.

Era la voz de Nidai, esta noche si que hay visitantes en mi cabaña.

— ¿Qué sucede? — Le abrí la puerta.

— Es sobre Akane.

— ¿Akane? ¿Le paso algo a Akane?

— Creo que tiene pensado pelear por Monokuma. — Esa información si la sabia, ¿Pero por qué Nidai se acercaría a mi a decirme esto? — ¿Tú sabes lo que pasará no? ¿Tú sabes como evitar que pelee con él?