Capítulo 11 ⵂ Indicios pequeños

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Cada día a tu lado es un nuevo infierno para mi.

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Quizás sea por la impresión de ayer o que tal vez no este acostumbrado a tanta atención repentina pero Jungkook se estaba comportando muy raro desde que amaneció, creía que lo iba a evitar como es costumbre de él cuando algo no sale como quería o cuando esta enojado, pero es todo lo negativo en ésta ocasión, se levantó temprano a hacerle el desayuno, después lavo los trastes y ahora mismo esta preparando palomitas porque quiere ver un maratón de películas de Harry Potter con él, no está de más decir que esta atónito ante ello, hasta le había preguntado por lo de ayer y de su comportamiento pero solo evitaba el tema dando pequeñas risas tímidas. ¿No estará enfermo o habrá reprobado algún examen? es que no encuentra otra razón por la cual se porte tan lindo sin esperar nada a cambio, no esperaba nada ¿verdad?

— ¿Ya estás colocando la película, papi lindo? — Sacó de sus pensamientos al castaño que solo asintió de manera torpe regresando a la realidad, ahí se podía mirar a la perfección su nerviosismo; En la acción de asentir cuando no lo podía ni siquiera ver. — ¿Papá?

Parpadeó repetitivamente notando aquel acto demasiado bobo a su parecer, ¿por qué asentía si no lo miraba? definitivamente estaba lejos de la realidad, pero ¿por qué se alteraba? ¿Qué su hijo no sólo puede ser amable con él por que lo ama y ya? no debe de haber un porqué en cada cosa buena que haga, debía confiar más en Jungkook, era su hijo, joder, como padre debe confiar en él, aunque... quizás se portaba así porque estaba arrepentido por lo de ayer... esa si era una opción lógica.

— Sí, amor, ya puse la película. — Respondió ya más relajado, removiéndose en el sofá buscando la posición perfecta ya que iban a estar sentados por horas.

— ¿Sí pusiste la correcta esta vez? — Preguntó de manera burlona él azabache saliendo de la cocina poseyendo en su mano un gran plato hondo llenó de deliciosas palomitas ya preparadas, sal y limón, como le gustaba a ambos.

— Si ¿Cómo puedes desconfiar en mi habilidad lectora? — Preguntó llevando una mano a su pecho fingiendo indignación.

— No sé, la otra vez pusiste el misterio del príncipe mestizo en lugar de la piedra filosofal — Le contestó tratando de no reír demasiado ante aquel recuerdo, mientras se sentaba a su lado dejando las palomitas en la mesita del centro, que atrajo hacía ellos para más comodidad y así evitar tener que estirarse para tomarlas.

— En mi defensa creí que serían películas al azar, no en orden.

— ¿Quién mira una saga de películas al azar?

— Yo.

— Sólo tú en todo este mundo tan grande — Exageró no resistiendo más aquellas risas tan rebeldes que lograron salir de él sin aviso alguno, su padre lo miro entre cerrando sus ojos de manera acusatoria e indignado.

— ¿Cómo se supone que me sienta cuando mi propio hijo, sangre de mi sangre, se burla de mi?

Él menor cubrió sus rojizos labios con una de sus manos en un intento de dejar de reír, pero fue en vano, lo " peor " del caso es que aún se alcanzaba a escuchar su risa a pesar de que estuviera cubierta, no tanto como antes pero se escuchaba y eso era lo importante; Eso fue suficiente justificación para su padre que no dudó en tomar con una de sus manos un puñado de palomitas que lanzó a su hermoso hijo justamente en su rostro, ocasionando que éste lo mirará elevando una de sus cejas parando por fin de reír.

— ¿Acabas de lanzarme palomitas? — Preguntó aún conservando el tono divertido y burlesco en su voz, en verdad que su padre a veces podía ser tan infantil, aún más que él y eso que es mucho mayor por obvias razones. Le encantaba, era algo característico de él que hacía derretir su corazón y lo incitaba a cuidarlo como si fuese un lindo muñeco de porcelana.

él es mi papá | kooktaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora