Cap 2

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En la mañana el omega se levantó se dio un baño y busco algo de comer en eso su celular sonó lo tomo de inmediato y contesto la llamada.,—Felix nuevo trabajo.–dijo San y luego acento, Lix terminó su desayuno tomo sus cosas y se marchó a su misión su celular sonó era un mensaje de San con las instrucciones y una fotografía de su objetivo, la miró muy fijamente sonrió y comenzó al llegar al lugar lo vigilo desde lo alto de un edificio, con un larga vista observo cada paso que daba con quien se encontraba, debía esperar el momento preciso para volarle la cabeza, puso su ojo detrás de la mira del franco apunto a su objetivo solo debía jalar el gatillo estando por hacerlo un hombre se pareció frente a su objetivo haciendo de escudo.—Mierda.– chasqueó la lengua al ver que esta vez le tomaría más tiempo de lo normal aquel hombre que se interpuso era alto cabellos negros una piel clara se podría ver desde lejos que era un Alfa dominante lo siguió con el larga vista pasaron unos minutos y no se movía estaba cansado de estar ahí sin poder hacer nada de su bolsillo sacó unos chicles los cuales los llevo a su boca y volvió a su posición puso la franco en posición y miró a traves de la mira del arma, no pasó mucho cuando por por fin se iban dejando a su objetivo el cual sacó su celular Felix le apunto a la cabeza y sin pensar "PUM" cayó muerto Lix tomo sus cosas y se fue mando un mensaje a San "El trabajo esta echo" luego de eso estando en la calle caminando paso por un callejón en el cual no había nadie, pero sentía que alguien lo miraba se puso en alerta unos hombres salieron e intentaron atraparlo sin embargo les fue imposible ya que Felix sacó unas dagas de mano y empezó a apuñalarlos dejándolos muy heridos, su cara y ropa se mancharon del líquido rojo.—Mierda ahora tendré que cambiarme.–pateo a uno de los hombres y se fue.

Al llegar al lugar de trabajo entro a la oficina de San quien al verlo con sangre preguntó sobre lo que había pasado, Felix se sentó dejando sus cosas a un lado y habló.—Unos tipos que querían asaltarme o no se pero les di su merecido.-–San movió de un lado a otro la cabeza sabía bien como era el carácter de Lix si alguien se metía con el no dudaba en dejarlo más muerto que vivo, algunos que lo conocían temblaban al verlo por aquella razón no tenía muchos amigos, pero eso no le importaba.

San lo miró algo bajoniado así que lo llevaría a distraerse.—Felix ven conmigo al club.–Lix lo miró.—Claro vamos.–San lo mando a darse un baño y cambiarse de ropa, llegada la noche San junto a Lix llegaron al club ni bien entraron muchos omegas se acercaron a San, él era muy conocido ya que era cliente frecuente.

Rey de las armas Donde viven las historias. Descúbrelo ahora