RiversMi osito estaba muy duro hoy...
Quiero aplastarlo pero no puedo, se siente como si... Oh no.
Abrí los ojos de golpe y miré hacia abajo.
¡Qué hace Felix entre mis pechos!
A ver, recuerda.
Llore, Felix me trajo a su casa, tomamos té, y nos dormimos.
Delicadamente deje a Felix en su almohada y me levante a buscar mi teléfono para ver la hora.
¿¡Sábado 10 de la mañana!?
Me senté en la orilla de la cama justo al lado de Felix.
Unos brazos rodearon mis caderas.
— Ven un ratito más...
— Lix, hay que levantarnos ya.
— ¿Qué hora es...?
— 10 de la mañana.
— ¡Mierda dormimos una eternidad! Llegaré tarde a mi clase...
Me quería reír fuertísimo pero me aguanté y solo sonreí
— ¿Qué pasa por qué sonríes?
— Felix, es sábado.
Su cara cambió rápidamente y yo solté mi carcajada.
— Ya estoy despierto, ni modo. — se acercó a lo que parecía su guardarropa y sacó una camiseta y un short.
¿Se iba a vestir frente a mí? Yo también lo hice pero...
Durmió con un buzo Nike y una camiseta normal.
Cuando retiro los pantalones se dio la vuelta obviamente, pero cuando se dio la vuelta...
Mierda ¡Que paquetox!
Y cuando se retiro la camiseta....
¡Su abdomen!
¿Recuerdan cuando les narré la primera vez que vi su abdomen?
¡Sigue igual de tonificado y marcado! Más marcado que ese día diría yo.
Lo único que no estaba eran las venas.
— Buenos días, bellos durmientes. de repente entró Óscar a la habitación.
— ¡Filis me estoy vistiendo! — cubrió su abdomen con la camiseta.
— ¿A Samantha no le dices nada? Ok Felix, y yo que tenía unos cupones de regalo que pensaba regalarte.
— ¿Quieres ver como me visto?
— ¡No me refiero a eso! Olvídalo, vengan a desayunar, descarados.
Cuando volteé a ver a Felix ya tenía su camiseta puesta. Se acabó el show...
— Samy, tienes los ojitos hinchados, le pediré los parches a Ama.
— Gracias...
— Bueno ¿Vamos?
— Si, espérame.
Me puse de pie y caminé junto a Felix sintiéndome la dueña con la camiseta de Felix que está cómoda la verdad.
— ¿Qué es esa aberracidad que hay en la mesa?
En la mesa no había nada, únicamente Ama sentada.
— ¿Estas hablando de mi? — dijo Ama a indignada — Pues mira esto.
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Lencería ── riverduccion
Aléatoire𝐑 • 𝐑𝗂𝗏𝖾𝗋𝖽𝗎𝖼𝖼𝗂𝗈𝗇 𝖺𝖽𝖺𝗉𝗍𝖺𝖼𝗂𝗈𝗇 ' 𝘀 「 Felix, estudiante de universidad, 19 años. Es un maldito pervertido y su morbosidad no tiene limites... Y Samantha, embajadora de Chanel y una maldita celosa, pero eso era lo que le gustaba a...