De repente, un crujido resonó a pocos metros de ellos. Jungkook se detuvo en seco, sus músculos tensándose como los de un depredador a punto de atacar. Sus ojos se entrecerraron, tratando de identificar la fuente del ruido.
Taehyung, sintiendo un escalofrío recorrer su espalda, se apresuró a esconderse detrás de Jungkook, aferrándose a su chaqueta con fuerza. Aunque solía ser valiente, el bosque amplificaba sus temores más profundos.
Jungkook levantó una mano en señal de silencio, indicando a Taehyung que no hiciera ruido. Con movimientos fluidos y sigilosos, avanzó un paso hacia el lugar de donde provenía el crujido. Sus ojos escudriñaban cada sombra, cada movimiento en la penumbra.
La tensión era palpable. El bosque parecía contener la respiración, esperando ver qué sucedería a continuación. Jungkook, sintiendo la presencia de Taehyung a su espalda, se armó de valor. Sabía que debía protegerlo a toda costa.
De repente, una figura emergió de entre los árboles. Jungkook se preparó para atacar, sus instintos afilados como cuchillas. La figura se movió rápidamente, revelando su forma un animal salvaje, grande y feroz, con ojos brillantes que reflejaban la luz del sol.
El animal, al verlos, soltó un rugido ensordecedor y se lanzó hacia ellos con una velocidad impresionante. Taehyung, paralizado por el miedo, apenas tuvo tiempo de reaccionar.
Jungkook, sin perder un segundo, dio un paso adelante. Con una fuerza y precisión sobrehumanas, lanzó un golpe devastador con su puño derecho. El impacto fue tan fuerte que el animal cayó al suelo de inmediato, sin vida.
Taehyung, aún temblando, salió de su escondite detrás de Jungkook y observó el cuerpo del animal con asombro. La fuerza de Jungkook era impresionante, casi irreal.
-¿Estás bien? -preguntó Jungkook, volviendo la mirada hacia Taehyung con preocupación.
Taehyung asintió, intentando recuperar el aliento.
-Sí, gracias a ti -respondió con voz temblorosa-. Eso fue increíble.
Jungkook esbozó una leve sonrisa y, sin más preámbulos, se agachó para levantar el cuerpo del animal. Con un movimiento ágil, lo cargó sobre su hombro como si no pesara nada.
-Vamos, sigamos adelante. Esto nos servirá de alimento y también como advertencia para cualquier otra criatura que piense atacarnos -dijo Jungkook, retomando la marcha con Taehyung siguiéndolo de cerca.
Ellos continuaron su camino a través del Bosque con Jungkook a la cabeza y el cuerpo del animal en su hombro. El día aún era joven, y aunque el peligro acechaba.
El crujido de las ramas bajo sus pies era el único sonido que rompía el silencio. Taehyung no podía evitar pensar en su hogar, en la calidez y la seguridad que representaba. Pero esa idea se desvanecía rápidamente cada vez que miraba a Jungkook, quien caminaba a su lado con el cuerpo del animal salvaje sobre su hombro.
Sabía que volver a casa no era una opción. Jungkook, con su fuerza descomunal y su reputación de "La Bestia", era temido y odiado por muchos. Sus padres no entenderían, y el miedo a que Jungkook pudiera lastimarlos, aunque fuera sin intención, era suficiente para mantener a Taehyung alejado.
-¿En qué piensas? -preguntó Jungkook, notando la expresión sombría en el rostro de Taehyung.
-En casa -respondió Taehyung con un suspiro-. Pero sé que no podemos ir. No quiero poner a mis padres en peligro.
Jungkook asintió, entendiendo perfectamente. Aunque a menudo se mostraba frío y distante, tenía un profundo respeto por taehyung aunque Sabía que su presencia solo traería problemas a la familia de Taehyung.
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No Abrir la puerta
HorrorEn un laboratorio oculto bajo capas de secreto gubernamental y seguridad impenetrable, nació una creación que desafía la comprensión humana. Jungkook, un ser moldeado desde el inicio de su existencia con una mezcla de ciencia avanzada y un oscuro pr...