La Grulla Enamorada | Una historia de amor sobre Kamisato Ayaka

Disturbios en Ritou, parte 3

¿Qué debería hacer?

Muchas cosas han pasado en el último tiempo, y muchas cosas parece que cambiarán en los siguientes minutos.

Quizás incluso segundos.

La Shogun Raiden, la gran Arconte Electro sigue ahí, parada frente a nosotros sin decir ni una sola palabra.

Ha llegado desde algún lugar desconocido con la rapidez de un rayo. Todo el bullicio generado por decenas de soldados Fatui e Imperiales ha sido cambiado a un silencio abrumador.

...

¿Cuánto tiempo ha pasado?

Cierto. En estos casos, cuando te enfrentas de cara a la muerte, el tiempo pasa mucho más lento. Nada pasa más rápido que tus pensamientos. Posiblemente la muerte pase más rápido de lo que piensas, por lo que tu mente intenta ir todavía más rápido. O al menos eso es lo que quiere.

Mi cabeza está a 100 por hora, pero mi cuerpo simplemente se ha quedado quieto. Mi mente trata de encontrar algo en mis recuerdos que pueda sacarme de este apuro.

Pero no encuentro nada.

Mi cuerpo no reacciona a nada, pero ¿Qué se supone que hagamos en esta situación? ¿Enfrentarla de una vez? Teníamos un plan que ya había sido completamente inutilizado.

Sigo inmóvil.

Todos a mi alrededor están igual, excepto Miko.

"Veo que el Triunvirato ha realizado varias acciones mientras estaba afuera de la isla. Agradecería que me informaran de todo lo que tienen planeado."

...

Nadie respondió

Nadie tiene la valentía de hacerlo.

Es obvio, la misma Shogun Raiden está aquí, y sabe todo lo que habíamos planeado. ¿Teníamos alguna pista? No, pero estábamos más que seguros de ello.

Ella sabía, entonces solo estaba jugando con nosotros.

En estos momentos, no éramos más que una marioneta. Al servicio de otra marioneta.

Entonces...

"Solo estábamos juzgando a una criminal, Su Majestad. Pero parece que la juzgada trajo refuerzos inesperados. Lamentamos el desorden, pero este es un tema de seguridad nacional"

Ayato habló desde atrás. Todos voltearon a verlo.

Ahí estaba, con un semblante intacto. Ni dejaba ver ni un ápice de nerviosismo.

"La información que me llegó era un ataque Fatui a la isla, ¿esto es así?"

"Lamentamos los malentendidos, pero el ataque Fatui solo era una posibilidad, más no una garantía. Creo que habíamos sido bastante claros en nuestra comunicación. Sin embargo, inesperadamente, una nueva facción de los Fatui atacó cobardemente tratando de salvar a su lideresa. Nuestro ejército y la nueva lideresa Kujou se está encargando del asunto"

"Ya veo..." 

Contesto fríamente la Shogun.

Entonces, fue caminando lentamente hasta el estrado donde un juez civil dirigía el caso de Signora.

"¿Y dónde está?"

"Desgraciadamente, en un desafortunado desenlace de los hechos, esta ha sido tomada por los Fatui y algunos... actores externos. Pero Kujou ya está en la labor para recuperarla"

"Entiendo, una vez termine con ello, deben presentármelo para yo personalmente ejecutarla"

"Como ordene, Arconte"