La Grulla Enamorada | Una historia de amor sobre Kamisato Ayaka

Secuestro

Finalmente, el barco de rescate llegó.

Unas cuantas horas depués de lo previsto, pero dentro de lo aceptable.

Thoma y sus soldados se encargaron de empacar todo una vez llegaron los encargados del viaje. Debido a los contratiempos, no sabían si es que iban a llegar a tiempo o tendrían que pasar una noche más. Ayaka se quedó en la carpa principal, sin siquiera salir una sola vez a saludar.

Había parado de llover, pero las nubes no se habían retirado del todo, había la posibilidad de que la lluvia vuelva aunque sea por un corto periodo.

"¡Apúrense, no tenemos todo el día!"

Thoma guiaba a sus compañeros mientras retiraban las carpas y demás pertenencias.

"¿Exactamente... que fue lo que pasó?"

Preguntó Thoma

"Nosotros tampoco tenemos los detalles, pero la Shogun recibió una comunicación inmediata para regresar a Narukami... según los rumores, parece que los Fatui están atacando el puerto de Ritou"

"¿¡Qué...?!"

¿Por qué nos traicionarían los Fatui? Estaba a punto de decir, pero se contuvo en ese momento.

Thoma sabía de la presencia de Snezhnaya, pero un ataque de esta nación estaba lejos de ocurrir.

¿Yae Miko lo habría engañado?

Aún recuerda una de las tantas conversaciones que tuvo con ella en el Cerezo Sagrado.

...

"Si todo va de acuerdo al plan, tendremos a Ei de vuelta en poco tiempo..."

"¿Pero no es demasiado peligroso confiar en esa banda de mercenarios...? Con todo respeto, Gran Sacerdotisa, he recabado información de que los Fatui ya han hecho estragos en Mondstadt y Liyue..."

"Tranquilo. Justamente es por eso que nuestra colaboración es vital. Ellos necesitan algo de esta nación, y nosotros se lo vamos a proveer sin que gasten recursos. Solo tienen que actuar dentro de nuestros límites y órdenes. Ellos buscan algo muy específico... solo que sus métodos son bastante... ortodoxos"

"Aún así, si están dentro del Confiscamiento de Visiones..."

"El Confiscamiento viene de otro lado de Inazuma, los Fatui tienen poco que ver. Aún así, es la mejor manera de forzar a Ei a actuar..."

"Pero si Ei no sale se perderán muchas vi-"

"Que se pierdan, entonces. 100 visiones son poco para el daño que le hace a esta nación permanecer inmóvil durante un centenario más."

...

No sabía qué más hacer.

Tampoco sabía cómo se convirtió en el azuzador de una crisis controlada en Inazuma.

Pero sí estaba seguro de algo: es mejor estar involucrado que no saber nada y hacerse de oídos sordos.

Al final del día, su objetivo es proteger a la familia Kamisato.

Posiblemente la señorita en la carpa lo vaya a odiar por el resto de su vida.

Pero al momento de blandir su lanza ese día, estaba consciente de las consecuencias.

Y, ante todo, estaba seguro que era un paso necesario para salvaguardar a la menor hija de los Kamisato.

Quizás... debería entrar a su carpa y tratar de explicarle todo.

Realmente las cosas no quedaron tan bien, él se ofuscó y terminó por despreciar a sus compañeros de guerra.

...